Desde 1993 que no se realiza una reforma importante a la institucionalidad de las alcaldías, así como a sus plantas de funcionarios, lo que ha generado muchas de las dificultades que vive dicho sector y que han quedado en evidencia con el extenso paro de sus trabajadores.
Si bien los distintos gobiernos reconocen que el municipio es el primer brazo del Estado, puesto que entrega la mayoría de las prestaciones que reciben sobre todo las personas de menos ingresos, el carácter subsidiario que establece la Constitución provoca que la mayoría de los recursos fiscales lleguen por la vía de la subvención.
Dicho mecanismo hace que ante la carencia de dinero en muchas comunas se destine a tapar otros vacíos.
Así lo reconoce el alcalde de Lo Prado, Gonzalo Navarrete, quien en su calidad de presidente de la comisión de educación de la Asociación Chilena de Municipalidades (ACHM), comentó a Radio Universidad de Chile que esta situación se ve profundizada con instituciones tales como el fondo común municipal.
Navarrete agregó que ese sistema financiero provoca que municipios con habitantes de alta vulnerabilidad reciban un promedio de 90 mil pesos por persona al año, mientras los ricos obtienen entre 700 y 900 mil pesos per cápita anuales.
El presidente de la ACHM y alcalde de La Cisterna, Santiago Rebolledo, comentó a nuestra emisora que la crisis de recursos en educación y salud es cada día más dramática.
“En el tema de la educación municipal, no tenemos alumnos, la gente no matricula y tenemos un déficit estructural tremendo. Solo el año pasado traspasamos 178 mil millones de pesos las municipalidades, para pagar los sueldos de los profesores, y 80 mil millones de pesos en salud de la atención primaria para mantener nuestros consultorios”, alertó.
Matías Goyenechea, de la Fundación Creando Salud, indicó que en el caso de los servicios sanitarios no hay grandes diferencias en la administración, puesto que la precariedad es generalizada y, por lo mismo, se requiere una revisión más integral del sistema.
“Nosotros pensamos que es necesario establecer un marco mayor de integralidad. Esto tiene que pasar, por ejemplo, con limitar las atribuciones de las autoridades municipales en la asignación de recursos, para evitar problemas como que con los recursos de salud se contrate a otras personas, por un lado. Y por otro lado, también desde el punto de vista de que tiene que existir una coordinación integral del sistema para beneficio del paciente, lo cual puede significar avanzar hacia la desmunicipalización”, afirmó.
Jorge Abedrapo, presidente metropolitano del Magisterio, recordó que además de la ya sabida crisis de claridad de la educación municipal, muchas veces los alcaldes destina dineros de esa área para otros ítem que les parecen más urgentes, siendo el caso más grave, el no pago de sus cuotas previsionales.