Desde el pasado viernes, el Sindicato Nacional del Instituto Profesional Escuela Moderna de Música permanece en una huelga legal que recién este fin de semana podría tener un acercamiento entre las partes.
Se trata de 15 profesores, entre unos 60 con los que cuenta la entidad, que decidieron hacer efectiva la paralización, después de no llegar a acuerdo durante su negociación colectiva. Desde entonces han realizado distintas manifestaciones frente a la sede de Vitacura, en las que han contado con apoyo de estudiantes.
Los profesores demandaban la implementación de una carrera docente, un reajuste salarial de 3,5 por ciento sobre el IPC, un bono de término de conflicto de 250 mil pesos, aguinaldos y otros beneficios, además de cambios relacionados con las jornadas laborales.
Esto, según el presidente del sindicato, Cristián Martínez, porque “no sentimos que haya un reconocimiento a nuestra labor ni una motivación para que sigamos perfeccionándonos”.
Luego de casi una semana en huelga, el sindicato y la rectora de la Escuela Moderna, Vivien Wurman, sostuvieron este jueves una reunión en la que los trabajadores entregaron una propuesta, que debe ser respondida este viernes por la entidad.
“Por todo lo que ha involucrado la huelga, finalmente hemos llegado a un bono por el reconocimiento de la antigüedad de los profesores del instituto. Es lo mejor que hemos podido negociar con la empresa. Eso está conversado, pero todavía no tenemos los valores de ese bono y se supone que ellos van a entregarlos. Nosotros propusimos que a los cinco años se entregue un bono de 200 mil pesos; a los diez años, 400 mil; y a los 15 o más, 600 mil”, explicó Martínez.
En ese sentido, el presidente del sindicato consideró que “en este momento la huelga está más cerca de resolverse, si es que la contrapuesta es algo razonable”. Luego que ésta sea entregada, ambas partes se reunirán el lunes para encontrar una salida.
Laureate, otra vez en la mira
La Escuela Moderna de Música fue adquirida en 2008 por el grupo estadounidense Laureate, propietario de las universidades Andrés Bello, Las Américas y de Viña del Mar y del Instituto AIEP y vinculado con el escándalo de la Comisión Nacional de Acreditación y acusaciones de lucro.
Esos antecedentes no han pasado desapercibidos para los trabajadores en huelga. Según explicó Cristián Martínez, “nos preocupa la política que se está tomando con estos holdings extranjeros que compran universidades o institutos y en los que el factor económico es el que prima por sobre el académico. Justamente, los problemas que tenemos son porque chocan esos dos mundos”.
“No hay una reinversión efectiva en la parte académica y todo se calcula a nivel de dinero. Ingenuamente, nosotros tuvimos la idea de que con este traspaso iba a haber un crecimiento de la institución y una mejor gestión, pero hemos comprobado que seguimos con los mismos vicios y una forma de funcionamiento que no da el ancho para una institución como esta”, agregó.
Consultadas por Radio Universidad de Chile, las autoridades de la escuela dijeron que no harían declaraciones.