Fue en agosto de este año que la Universidad de Chile informó que en terrenos de la Facultad de Medicina, lugar donde se construye la futura estación Hospitales de la línea 3 del Metro, se encontraron restos arqueológicos correspondientes en un primer momento a 12 mil piezas entre las cuales se encontraban cerámicas, lozas y pisos.

Luego en octubre de este año se firmó un protocolo de acuerdo entre nuestra casa de estudios y Metro y se contrató los servicios profesionales de la consultora Ámbito, especializada en patrimonio con énfasis en arquitectura y arqueología urbana.

El Consejo de Monumentos Nacionales aprobó la solicitud que se ingresara el 25 de noviembre para realizar 29 pozos de sondeo arqueológico de 1 x 1 metros en el área de la futura Estación Hospitales con el objeto de identificar la presencia de estructuras similares o relacionadas a las que encontrara la arqueóloga Verónica Reyes.

Luego de las primeras excavaciones se ha logrado determinar que los restos aparentemente pertenecerían a una casona que era utilizada como Escuela Primaria de mujeres en el famoso barrio de La Chimba, al calor de la llamada fase expansiva del sistema primario y que tuviera un hito relevante en la Ley de Instrucción Primaria de 1860.

Por lo mismo, además de la importancia arqueológica del hallazgo, estos restos representan un símbolo de la importancia de la educación pública, en tiempos en que se discute en Chile qué tipo de instrucción queremos.

En esa línea, el rector de nuestra casa de estudios, profesor Víctor Pérez, sostiene que  “digamos que a lo mejor es una gota que permita rebalsar el vaso para que nos demos cuenta de la importancia de la educación pública y de la tradición republicana de Chile por tener una educación pública lo más extendida posible y también interesante que ésta es una escuela para mujeres, ya estaba la intención, el objetivo de que las mujeres fuesen también instruidas en el campo de la educación”.

Con los sondeos que se están efectuando, se caracterizarán los materiales arqueológicos encontrados para determinar qué y cómo rescatar los restos arquitectónicos, así como identificar la naturaleza de los mismos como prioridad.

Además se busca elaborar una propuesta que permita el mayor rescate posible de estos restos, siempre considerando la necesidad de la construcción de una Estación de Metro.

En ese sentido, la coordinadora de la investigación, historiadora y Directora del Archivo Central Andrés Bello, Alejandra Araya, explicó que “para poder hacer esta propuesta desde el punto de vista de la arquitectura en esa futura estación, dado que por cuestiones de tipo político y todo lo que implica las obras de Metro, no se va a poder rescatar la totalidad o dejarlo tal como está, que era nuestra propuesta inicial y que se cambiara el pique, pero siempre hay que hacer una armonía, una conversación entre las obras que son beneficiosas para la comunidad también, ya que, un Metro en este espacio es muy importante, pero que eso sea con valor agregado, o sea que las personas al entrar a la estación puedan entrar a su Historia también”.

En tanto, Metro S.A. sostiene que colaborará para llegar a un acuerdo respecto de la forma de preservar estos restos con la universidad, como sostiene su Gerente de Operaciones, Jaime Adasme: “Tenemos acuerdos con la Universidad de Chile desde hace bastante tiempo, donde el Metro ha accedido a poder ralentizar en esta área su proyecto, justamente buscando realizar este rescate, nos hemos juntado con la Vicerrectora de Extensión, con los historiadores de de la Universidad de Chile y ya tenemos acuerdos definidos”.

De acuerdo a lo expresado por los investigadores a cargo del estudio, la idea es que estos restos se ubiquen en la superficie para que la mayor cantidad de gente posible tenga acceso a ellos.

Esto choca con el proyecto original de Metro que pretende rescatar sólo una porción de lo descubierto y exhibirlo en un lugar especial al interior de la Estación, es decir, bajo tierra.

Se espera que durante el mes de enero se dé a conocer el proyecto definitivo que preservará este importante descubrimiento, luego que se alcance un acuerdo entre la Universidad y Metro, sobre la base de los estudios de la consultora Ámbito y la propuesta de la empresa de transportes.