El tren de Ferrocarriles del Estado (EFE) actualmente tiene dos líneas en su tramo Rancagua- Santiago y con el proceso de mejoramiento, que se enmarca en el proyecto Rancagua Express, se van a doblar las ya existentes, cuando se base existe un problema de conectividad al interior de estas comunas, algunas de las más pobladas de la capital.

Gabriela Burdiles, abogada de la Organización Fiscalía del Medio Ambiente (FIMA), quien representa a las comunidades de Lo Espejo, El Bosque y San Bernardo sostuvo que para aprobar la iniciativa sólo se presentó una Declaración de Impacto Ambiental y no un Estudio como se esperaría en un caso de tan alto impacto como este.

Por esto, la abogada representante de los vecinos explicó que “se van agregar una cantidad importante de trenes y con ello una cantidad importante de ruidos y vibraciones, se estima que van a transitar en el tramo Santiago-Nos 20 millones de personas, por lo tanto, es un proyecto que en su descripción ya uno puede ver ciertos impactos que no son abordados por un estudio, sino meramente por una declaración y por tanto no se considera ninguna medida de mitigación respecto del ruido, las vibraciones que se van a provocar con el paso de los trenes”.

Esto preocupa a los ciudadanos, para quienes esta obra se ha desarrollado de forma irregular, ya que no han sido consultados en ninguna de las instancias donde debió haber existido participación ciudadana. Además, indicaron que cuentan con el respaldo de todas las comunas afectadas, incluyendo también a Pedro Aguirre Cerda, pero no han podido acceder a las autoridades responsables.

En esa línea, Catalina Huerta, vocera del Frente Amplio de Defensa Ciudadana de Lo Espejo enfatizó que “nosotros hemos recurrido a todas las partes posibles antes de llegar a la corte, acudimos al Presidente de la República, al ministerio de Transportes, a los consejeros regionales como pobladores para pedir que este proyecto no es que no se haga, sino que sea ejecutado de otra manera porque en realidad nosotros nos sentimos pasados a llevar como pobladores”.

La dirigente indicó que no quieren oponerse al progreso, pero no están dispuestos ser los perjudicados en su calidad de vida debido al ruido y las vibraciones, así como la congestión que podría producir esta obra. Esto además del temor de que pueda ocurrir cualquier tipo de accidente frente a sus propias viviendas.

También indicó que con esto se sigue acentuando la diferencia y la discriminación con los pobladores, quienes fueron instalados en dichas zonas por el mismo Estado. Esto cuando la empresa estatal separó el plan integral Rancagua Express en su tramitación, y de esta forma, evitó realizar mitigaciones y compensaciones.