Un amplio triunfo obtuvo Ennio Augusto Vivaldi Véjar en la segunda vuelta de las elecciones a Rectoría de la Universidad de Chile. Médico cirujano, profesor titular en el Programa de Fisiología y Biofísica del ICBM en la Facultad de Medicina, donde también fue vicedecano.
Vivaldi se impuso con un 58% de los votos (1019 preferencias), mientras que Morales obtuvo un 42%, equivalente a 737 votos.
En directo con Radio Universidad de Chile, Vivaldi señaló sentirse “muy contento”, e indicó que “hay un ánimo excepcional, hay una gran confianza respecto de los cambios en la Universidad y la proyección de ésta en el país”.
Respecto de las primeras tareas, señaló que “hay que ver la contribución a la salud, el problema del hospital, y analizar la gestión de la Universidad”.
Hace pocos días Vivaldi se reunió con la ministra de Salud, Helia Molina, y se esperan nuevos encuentros con autoridades de Gobierno. En esa línea, apuntó que “me importa mucho reunirme con las comisiones de la Cámara y el Senado, hay que lograr un trabajo conjunto en función de potenciar la Universidad de Chile”.
Ennio Vivaldi: “Es el gran momento para reconstruir la Universidad de Chile”
“La gran tarea de la Universidad de Chile es construirse a sí misma construyendo el país, y hoy día construir al país significa reencontrarnos con un espacio público y volver a tener un país de gente inquieta, multidimensional, que discute y conversa ideas”. Ese es el mayor anhelo del nuevo rector de nuestra casa de estudios, según declaró en entrevista con Radio Universidad de Chile.
Ennio Vivaldi, quien se instalará en el sillón de Bello el próximo 13 de junio, deberá enfrentar un momento crucial para la educación y, por cierto, para la Universidad, en el marco de la discusión de las reformas que en ese sentido impulsa el gobierno.
“El gran problema por el que tenemos que jugarnos es: ¿Es la Universidad de Chile una más?, que es lo que se tratado de instalar desde el ‘81. La Universidad de Chile tiene una misión propia, es universidad pública y estatal, y tenemos que aterrizarla en grandes proyectos. Cuando se ha hablado de reformas, de nuevo trato con el Estado, de que tiene que volver a tener una relación preferencial. En todo el mundo hay un rol que el Estado le asigna al desarrollo del país a la universidad estatal, y que está en la fundación misma de la Universidad de Chile. No está para competir con otras universidades, está para cumplir un rol a nivel país. En la medida en que volvamos a tener conciencia de que necesitamos la reconstrucción espacio público, entonces el rol de la Universidad de Chile no es ser otra más. Este es el gran momento en la Historia para refundar esa idea”, afirmó.
En este sentido, la nueva autoridad hizo un llamado a no perder “el gran sentido que le da el discurso fundacional de Andrés Bello, de ser la universidad que está comprometida con el país en su conjunto y que juega un rol fundamental en el desarrollo del país. Eso es algo que debería entenderlo la clase política chilena, y por muchas razones, porque el carácter de universidad pública, estatal y nacional es algo que compromete transversalmente a todo el espectro político y está la Historia y la tradición el país puesta en juego”.
Durante su campaña, el profesor Vivaldi declaró además que “este es momento para reconstruir el rol de la Universidad”, y que en este proyecto la restitución de sedes regionales, que le devuelvan el carácter nacional, es un punto fundamental.
Acerca del debate nacional sobre el carácter público o privado de las instituciones de educación superior, el ex vicepresidente del Senado Universitario señaló que no se debe ocultar tras el discurso la intención de algunas universidades de conseguir fondos estatales declarándose con una “función pública”, aunque tengan un marcado carácter privado. “El gran drama que ha ocurrido en Chile en las últimas décadas, en el fondo, es una forma disimulada de hablar de plata, hablar de universidades”, dijo.
“Una universidad no está hecha para estar calculando cuánta plata invierto, cuanto entra y cuánto voy a ganar, una universidad es un ambiente, que está compuesto por sus académicos, sus estudiantes y funcionarios, que le dan vida. Es un espacio formativo. Además, el título autoriza a ejercer una determinada función. No sé cuántas cumplen hoy con ambos factores. El primero es claramente deficitario en muchas de ellas, no son ambientes intelectuales. Lo otro es que claramente es una forma de entregar títulos que en la práctica nunca van a ser usados o reconocidos por motivos obvios. Es fundamental la definición de una universidad, y reivindicar el concepto de los postgrados, de los postítulos”, declaró.
En esta misma línea, el médico cirujano de la Universidad de Chile, experto en neurofisiología del sueño, se mostró a favor de los anuncios de gratuidad de la educación porque, adujo, contribuiría a “quitarle el carácter de negocio a la función universitaria”.
El nuevo rector apuntó que la reconstrucción del espacio público, y de la Universidad de Chile como elemento central de éste, será uno de los principios que guíen su administración y que marquen su postura en momentos en que el país decide qué tipo de educación quiere.