En cinco meses de la gestión de la Presidenta Micchelle Bachelet su aprobación alcanza el 54 por ciento. Así lo indicó la última medición de Adimark, encuesta mensual que mide la evaluación del Gobierno en diversas áreas.
El puntaje alcanzado por la mandataria tiene una baja de 4 puntos respecto del inicio de su administración. Sin embargo, indican que su actual nivel de aprobación es 11 puntos más alta que la que tenía en idéntico período de su primer mandato en julio de 2011.
El Gobierno en general representa una fuerte caída de 9 puntos, llegando al 48 por ciento de aprobación y alcanzando su peor evaluación en lo que va de gobierno.
Los ministros también son medidos por la encuesta. Según los datos entregados, 14 secretarios de estado al menos un 40% de conocimiento
En cuanto a su evaluación, Jorge Burgos (Defensa), Álvaro Elizalde (Vocería), Alberto Undurraga (Obras Públicas) y Paulina Saball (Vivienda y Urbanismo), aumentaron su aprobación en forma significativa respecto al mes anterior. En tanto, el canciller Heraldo Muñoz se mantiene como el ministro mejor evaluado (83%).
En la vereda contraria se encuentra Nicolás Eyzaguirre. El jefe de educación presenta un nivel de desaprobación de 50 por ciento, por primera vez mayor a su aprobación (40%).
La ministra Helia Molina ha tenido que enfrentar los colapsos de algunos centros hospitalarios por la sobredemanda estacional y las movilizaciones de sus funcionarios e incluso paros, “lo que podría explicar el descenso de 9 puntos que ha tenido en su aprobación desde mayo a julio”, dicen desde Gfk Adimark.
En cuanto a las reformas, el respaldo a la Tributaria subió 5 puntos en julio y quedó en 50 por ciento. Mientras que la Educacional tuvo una leve alza de 3 puntos en su respaldo y se posicionó en 52 por ciento.
En cuanto a los efectos de la Reforma Tributaria, “los resultados reflejan un cierto grado de polarización en la población”, plantean. Un 60% cree que la reforma va a afectar negativamente a la clase media y un 49% cree que va a disminuir la oferta de empleo, mientras que un 51% cree que no va a contribuir a disminuir la desigualdad.