Cerca de 350 páginas tiene el Código de Buenas Prácticas en las Artes Visuales que presentaron en la noche de este jueves Arte Contemporáneo Asociado (ACA), la Asociación de Pintores y Escultores de Chile (APECH) y la Sociedad de Escultores de Chile (SOECH), entidades que representan a más de un millar de artistas.
El documento hace énfasis en tres puntos: las remuneraciones de artistas, teóricos e historiadores del arte por su trabajo; el respeto de los derechos de autor; y la normalización de los contratos por escrito.
A partir de esos temas se desprenden las cuatro partes de la propuesta, que contiene un decálogo de buenas prácticas profesionales, un código de relaciones entre artistas y espacios no comerciales como museos y centros culturales y una sección similar, pero dedicada a la relación entre autores y galerías comerciales. La cuarta y más extensa sección es una guía que propone distintos modelos contractuales para artistas y especialistas.
El código es una adaptación de un documento similar que la Asociación de Artistas Visuales de Cataluña elaboró en 2007 y ya fue adoptado por dos instituciones locales: el Museo de Artes Visuales (MAVI) y el Museo de Arte Contemporáneo (MAC).
“El principal problema en Chile es que las relaciones laborales no son formales. Eso genera un empobrecimiento del sector, un menoscabo de los derechos de propiedad intelectual y lo que conlleva tener trabajo informal: carencias en salud, previsión, etc. También hay muchas violaciones de la propiedad intelectual, que se relacionan con el derecho de uso de obra”, explicó Esteban Córdova, presidente de ACA.
Esteban Córdova explicó que las organizaciones desarrollan conversaciones con el Consejo de la Cultura hace tres años, para que el código sea adoptado oficialmente, por ejemplo, en la entrega de fondos concursables. De hecho, representantes gubernamentales fueron invitados a la ceremonia de lanzamiento que se realizó el jueves en Providencia.
Sin embargo, dijo el dirigente, los progresos han sido escuálidos: “En la etapa de Cruz-Coke se avanzó, pero no se llegó a ningún punto porque había temas ideológicos que a él no le parecían. En este segundo periodo de Michelle Bachelet ha estado lento”, afirmó.
“Ojalá esto sea aceptado oficialmente por el Estado, que éste sea el principal colaborador. Sería muy bueno que llegáramos a buen puerto con el Consejo, porque esto no va en contra de la propuesta de Bachelet sobre el tema, va en la misma línea”, dijo en alusión al programa presidencial.
El código se refiere específicamente al ámbito de las artes visuales, pero es promovido también por la Unión Nacional de Artistas, cuyo presidente, el actor Edgardo Bruna, sostuvo que son problemas que también afectan a otros campos culturales: “Siempre ha existido esta concepción curiosa de que los artistas no son trabajadores, sino gente que se dedica a esto por hobby y, por lo tanto, ¿qué derechos van a tener? Eso nos ha llevado a sufrir en distintos medios, como la TV y las galerías. Los que tienen las instituciones en su poder no respetan nuestros derechos, entonces no hacen contratos de trabajo ni respetan la propiedad intelectual”, aseguró.
El Código de Buenas Prácticas en las Artes Visuales se encuentra disponible en el sitio de ACA.
Foto: Archivo MAC.