“Miguel Enríquez. Un nombre en las estrellas. Biografía de un revolucionario” es el nombre del libro del historiador y periodista español Mario Amorós que fue presentado por el rector de la Universidad de Chile, Ennio Vivaldi, la Vicerrectora de Extensión y Comunicaciones de la Universidad de Chile, Faride Zerán, Andrés Pascal Allende, el diputado Gabriel Boric y Marco Enríquez-Ominami.
La publicación, iniciativa al conmemorarse 40 años de su asesinato, revisa la trayectoria política y personal del mítico dirigente, que se encuentra entre los fundadores del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR) en la ciudad de Concepción.
Enríquez es descrito en el libro como un hombre que contagiaba alegría, de pensamiento y palabra veloz, intransigente en el debate. Luego del golpe de Estado, se vuelve uno de los hombres más buscados por los aparatos represivos de la dictadura y es asesinado en un enfrentamiento en San Miguel.
El enfrentamiento fue desigual, Miguel Enríquez recibió según el informe de la autopsia 10 impactos de bala.
Durante la presentación del libro, el rector de la Universidad de Chile, Ennio Vivaldi recordó anécdotas personales vividas en el liceo donde ambos, con diferencias de años, cursaron sus estudios.
Su hijo, Marco Enríquez-Ominami que sin conocerlo reconstruyó sus últimos días y los hechos que rodearon la muerte Miguel Henríquez para presentarlo en el Informe Rettig, agradeció los saludos que les hicieron llegar los presidentes de Ecuador Rafael Correa; de Bolivia Evo Morales; de Venezuela, Nicolás Maduro, entre otros. También destacó los saludos del mundo de la cultura y el arte a nivel internacional y la presencia de políticos de la izquierda tradicional chilena que llegaron hasta el salón de honor de la Universidad de Chile, como los presidentes del PS, del Partido Humanista, del Partido Ecologista, representantes del PC y la juventud, que hizo sentir su presencia a través de las consignas.
Marco Enríquez Ominami rescató que la resistencia es un derecho cuando se trata de enfrentar a un tirano, recordando no solo la experiencia del MIR, sino también del Frente Patriótico Manuel Rodríguez.
El diputado Gabriel Boric por su parte, manifestó que el libro le hizo sentir el fuerte peso de la historia, asegurando que se siente heredero de las luchas que otros dieron para alcanzar la democracia, resignificando el concepto de revolucionario, despojándolo de la caricatura que tenía en el contexto de un mundo bipolar. La Vicerrectora de Extensión y Comunicaciones de la Universidad de Chile, Faride Zerán señaló que la publicación está lejos de ser una apología, describiendo el relato como una historia sobria y sin estridencias.
El representante de la Fundación Miguel Enríquez, Andrés Pascal agradeció la acuciosa investigación que realizó el autor y planteó que la narración biográfica da cuenta de un personaje humano, despojándolo del ícono sacrosanto en que algunos han tratado de convertirlo y aseguró que fue un implacable defensor de las reformas impulsadas por el presidente Salvador Allende, pese a los enconados debates que sostuvieron durante el gobierno de la Unidad Popular.
Mario Amorós, envió un especial saludo al presidente de Bolivia, Evo Morales por su prólogo y explicó que su objetivo fue instalar la figura de Miguel Enríquez en el lugar que le corresponde junto a los grandes políticos y líderes que ha tenido el país, entre los que nombró a Elías Lafertte, Santiago Arcos y Salvador Allende.
La presentación de este libro al conmemorarse 40 años de la muerte de Miguel Enríquez redibujan al líder vehemente y lo sitúan en un recorrido por su vida, su paso por el Liceo, sus discusiones en la Universidad, sus calificaciones como estudiante, su vida personal a través de sus familiares y amigos más cercanos, sus amores y sus hijos. En el ámbito político lo instalan en la férrea defensa por la democracia y se valora sobre todo su consecuencia militante.
En el marco de los homenajes conmemorativos, este viernes se efectuará también un acto en el Teatro Cariola a las 18:30 horas, organizado por la revista Punto Final, el que tiene una convocatoria amplia. Al acto se invita a todos los que tuvieron una activa participación para derrocar la dictadura.