El pacto político social que unificó los dispersos esfuerzos de parlamentarios y organizaciones sociales, pretende lograr que el Gobierno se pronuncie claramente por un llamado a Plebiscito en el breve plazo, evitando dilatar el debate, que a juicio de las organizaciones, ya agotó las justificaciones.

Así, en el marco de las reformas impulsadas por el segundo gobierno de Michelle Bachelet, la necesidad de cambiar la Carta Fundamental quedó ubicada dentro de los cuatro pilares centrales de sus promesas.

“Es el momento de una decisión política y ciudadana trascendente: Chile necesita una nueva Constitución. Los ciudadanos son actores fundamentales en las transformaciones que nuestro país necesita”, señaló la mandataria.

Ante la ambigüedad que se constató en los discursos de la Presidenta Michelle Bachelet, y un Ejecutivo que dilata su agenda en esta materia, la “Bancada AC” y el Poder Social Constituyente iniciaron un trabajo de recolección de firmas para apoyar la moción legislativa que permita el llamado a plebiscito y una posterior Asamblea Constituyente.

Marca AC, una de las tantas organizaciones que forma parte del Poder Social Constituyente, representada por Genaro Cuadros, explicó las principales trabas que ha tenido esta propuesta.

“Ha existido una ambigüedad por parte del Gobierno para pronunciarse respecto de la forma, específicamente en cómo se enfrentará la elaboración de la nueva constitución. Además, la principal dificultad para quienes apoyamos la Asamblea Constituyente, es que la Constitución no prevé mecanismos eficaces para realizar modificaciones, ni tampoco para desarrollar consultas a la ciudadanía en torno a aspectos relevantes”.

El representante de Marca AC, aclaró que se busca la participación ciudadana y la posibilidad de que el pueblo elija el mecanismo concreto, que puede ser incluso otros que están en la palestra, como la comisión de expertos.

La ONG Acción, otro de los referentes que impulsa la AC, señaló a través de una de sus voceras, Loreto Bravo, que les pareció estratégico y favorable hacer este pacto político social. Ella destacó que no quieren ir al ritmo de la agenda del Ejecutivo, por esa razón decidieron sumarse a esta iniciativa.

“Nos parece muy pertinente haber desarrollado este pacto. Por una parte, los diputados operan dentro del marco de sus atribuciones, y por otro lado, está el trabajo de la sociedad civil, que sigue movilizada para conseguir apoyo, expresándose como en esta propuesta”.

El Diputado del Partido Liberal, Vlado Mirosevic, coincidió con que existe ambigüedad de parte del Gobierno y precisó que la AC es el mecanismo más democrático para elaborar una nueva carta fundamental.

“Nosotros pensamos que la Asamblea Constituyente es un mecanismo democrático. No es cierto que éste es un sistema anti institucional. Esos son fantasmas y mentiras que algunos quieren imponer.
De esta forma, apoyamos al pueblo, soberano que tiene que resolver cuáles son las normas de convivencia que debemos tener. Algunos expresan que la Asamblea Constituyente es un mecanismo poco institucional, pero la verdad es que a través de la propia democracia se podría construir constituciones”.

Si bien este referente está integrado por militantes de diversos partidos políticos, hay que recordar que esta materia ha sido controversial al interior del pacto oficialista, en especial de la izquierda.

Asimismo, se presenta una mirada distinta cuando se trata de aterrizar los contenidos y la orientación ideológica que tendrá la futura Carta Fundamental, en particular, en el resguardo de los derechos sociales y políticos de la ciudadanía.