Mientras el Gobierno y los parlamentarios de la Nueva Mayoría celebraron la caída del sistema electoral binominal después de 25 años, la oposición criticó diversos aspectos del texto aprobado este miércoles en el Senado, el que ya está en condiciones de avanzar a un tercer trámite constitucional en la Cámara Baja.
El ministro del Interior, Rodrigo Peñailillo, agradeció el conglomerado oficialista para sacar adelante esta reforma –una de las medulares del Programa de Gobierno de Bachelet-, además de la votación de la senadora del Movimiento Amplitud, Lily Pérez, y del independiente, Antonio Horvath, quienes permitieron alcanzar los quórums necesarios “para terminar con un sistema electoral único en el mundo y que le ha hecho mucho daño a la democracia chilena”, afirmó.
Mientras, desde la UDI criticaron esta reforma calificándola como un “traje hecho a la medida” de la Nueva Mayoría que, de acuerdo a su punto de vista, ahora tendrá la posibilidad de acceder a más cargos en el Parlamento gracias al aumento en el número de diputados y reacomodo de los distritos electorales.
En conversación con la tercera edición de Radioanálisis, el diputado (DC) Ricardo Rincón refutó estas apreciaciones del gremialismo y respondió que el único traje a la medida fue hecho por la dictadura a través de la Constitución del 80 y otras instituciones que perpetuaron el modelo de Pinochet.
“La UDI tiene que ser más cauta al ocupar el léxico en la contingencia política. Los únicos trajes a la medida son los que una dictadura militar impone por la fuerza de las armas sin discusión real de la ciudadanía, como la Constitución que tenemos que está tan parchada porque a nadie satisface, y así una serie de cosasa que hemos heredado, como el Plan Laboral del señor Piñera, hermano del ex Presidente de la República, y los sistemas electorales que fueron esos sí verdaderamente a su medida, para con un tercio tener a la mitad del Parlamento”.
Polémica por número de parlamentarios
Finalmente se incluye el aumento del número de diputados desde 120 a 155 y de senadores desde 38 a 50. Además, los distritos se reducen de 60 a 28, eliminando las sub-clasificaciones oriente/poniente, criterio que fue fuertemente cuestionado desde la oposición.
El presidente de Renovación Nacional, Cristián Monckeberg, afirmó que “se ha terminado de la peor forma posible con el Binominal. Es una oportunidad perdida para el país”.
Por su parte, el Senador de la UDI Hernán Larraín afirmó que con este aumento injustificado, según su punto de vista “se rompe la igualdad del voto”. El senador gremialista anunció que recurrirán al Tribunal Constitucional para que revise esta iniciativa, y expresó su molestia al afirmar que aquí se buscó aumentar los cupos para los partidos oficialistas, los que además, vienen “desfinanciados”.
El parlamentario apuntó a situaciones como la del distrito 2, en la Primera Región, que bajo las reglas de este nuevo proyecto, con 222 mil electores eligirá a tres diputados, mientras que el nuevo distrito 4, en la Tercera región, con 221 mil electores, obtendrá cinco diputados.
“Terminamos aprobando un proyecto mediocre que va a debilitar la institucionalidad política del país. Por la forma en la que están estructurados los distritos y el número de parlamentarios por distrito, este proyecto le regala a la Nueva Mayoría del orden de ocho a diez parlamentarios, lo que muy injusto y es grotesco. Pero no solamente hay una tergiversación de la representatividad ciudadana, sino que se limitan gravemente las primarias como un mecanismo para seleccionar los candidatos, los que seguirán siendo nombrados por las cúpulas”.
Cuotas de género y primarias
El Senador Larraín, en su última intervención se refiere a la tensión que existe con el aumento de cuotas para las mujeres. El proyecto impone un límite de 60 por ciento de los candidatos de un partido sea del mismo género, limitando la libertad de elección en las primarias, ante lo que la oposición se pronunció con fuerza. El diputado PPD Pepe Auth, explicó la lógica de esta pugna.
“Había una tensión entre aplicar la cuota es decir, exigirle al partido que tenga al menos un 40 por ciento del género menos representado y hacer primarias, porque obviamente si se hacen primarias tienes que respetar el resultado y si salen sólo hombres no se puede cumplir la cuota, y eso fue lo que hizo el Senado, en la práctica privilegió el cumplimiento de las cuotas”, afirmó.
Fortalecimiento de partidos y representación regional
Por otro lado, el proyecto baja los requisitos para formar partidos políticos, por ejemplo en la región de Aysén 90 personas ya podrán crear un partido político. Este es un tema que la oposición ha cuestionado varias veces, afirmando que, en pocos años, habrá 50 o 60 partidos, lo que “debilitará la democracia”. Además, permite que se asocien con candidatos independientes, punto que generó una fuerte polémica entre los senadores Carlos Bianchi y Antonio Horvath, ambos independientes.
Para el senador Bianchi con esto se merma toda posibilidad de independencia política, y, por lo mismo acusó al senador Horvath de “travestismo político”. Si bien pidió disculpas públicas, mantuvo su planteamiento. Por su parte el ex RN afirmó que aquí se negociaron otros aspectos que fortalecen la mirada que plantea la “bancada regionalista” que ambos conforman.
“Él no ha comprendido que esta reforma lo que hace es separar el dinero de la política, por otro lado bajar el gasto de las campañas, y algo que es muy importante para las regiones: la creación de partidos regionales. Acá el Gobierno y la Comisión han aprobado una serie de indicaciones que yo he presentado, consistentes con el trabajo que he estado haciendo con diputados independientes en la Cámara. Hay indicaciones mías que están aprobadas y obviamente yo soy parte de este proyecto en lo que se refiere a empoderar a las regiones, y a hacer campañas donde las personas son elegidas por sus propios méritos y no por los fondos que son capaces de movilizar”.
Sin embargo esta mirada no es compartida por todos. El liberal Vlado Mirosevic estima que el gran problema que crea el proyecto son los distritos, porque en los más grandes aumentará el aporte de recursos para poder competir.
“En general esta reforma se abrió a representar mejor a los partidos alternativos, a pesar de que no pudimos modificar en el diseño lo que ocurrirá en los distritos. En ese punto, el Ministro del Interior ya había declarado que no se tocaría y efectivamente no se hizo. Ni siquiera la Nueva Mayoría pudo influir ahí”, afirmó.
Temas pendientes
Al cierre de la votación la Sala ratificó el compromiso adquirido en la Comisión de Constitución con el Ejecutivo de rechazar las normas relativas al límite y control del gasto electoral, presentadas a través de indicaciones por el diputado independiente Vlado Mirosevic y Giorgio Jackson de Revolución Democrática, a la espera que el Ejecutivo presente una iniciativa específica al respecto. Esta será más que relevante en medio del llamado Caso Penta y un fuerte descrédito de la actividad política.
En cuanto al proyecto, vuelve ahora a la Cámara de diputados en tercer trámite, y desde el oficialismo se espera que sea aprobado antes del 31 de enero para cumplir con el plazo acordado en el cronograma.