En conversación con Radio Universidad de Chile, analista político, académico de la Facultad de Filosofía y Humanidades y director del Departamento de Estudios Pedagógicos (DEP), Ernesto Águila, sostuvo que el fondo del debate en la crisis política e institucional es apuntar a la Nueva Constitución, por sobre las políticas de transparencia y probidad que plantea el Ejecutivo a través de la Comisión Asesora Presidencial: “Lo que está ocurriendo acelera el debate constitucional”, afirmó el académico.
Sin embargo, Águila sostuvo que el acuerdo de los partidos realizado este jueves, donde se acordó respaldar a la instancia asesora, viene a dar carácter vinculante a sus resoluciones.
“Yo creo que la declaración de los partidos políticos traslada a la comisión Engel, y a la propia Presidenta, la responsabilidad de las medidas legislativas y administrativas. Yo creo que la declaración hace vinculante las resoluciones de la comisión, lo que es interesante porque no sabíamos cuál era su importancia y ahora es muy importante. Yo creo que la ciudadanía debería presionar muy fuertemente a la comisión para que sacara medidas claras y drásticas, pero además yo creo que el tema es disminuir el peso del dinero en la política, ojalá eliminarlo”
El especialista fue muy crítico con la izquierda y la centro izquierda chilenas, afirmando que los vínculos con la corrupción y los grandes grupos económicos no sólo representan un problema moral, sino que ponen en entredicho su proyecto político.
“Efectivamente en la derecha uno podría cuestionar qué tanta derecha política ha existido en este país, porque ha sido la derecha económica la que básicamente ha conducido a ese sector, pero este fenómeno de cierto grado de captura de la izquierda, me atrevería a decir además que no tiene mucho precedente histórico porque, si algo logró preservar la izquierda hasta el 73 fue su autonomía, y esa autonomía de los poderes económicos nace justamente de tener independencia financiera de esos sectores. Es un hecho que encuentro verdaderamente grave”.
Al Director del DEP un nuevo texto fundamental es la única acción que podría reconstruir el dañado contrato entre los ciudadanos y la política, y afirmó que éste no puede venir desde el Congreso Nacional, porque “los parlamentarios hoy tienen muy pocas condiciones (de credibilidad) de generar la Constitución Política que demandan los chilenos”.
Además advirtió que en el mundo son muy pocos los casos de regeneración democrática encabezada por los propios dirigentes, sino que tiende a darse un desplome del sistema de partidos como en Italia, Perú, Venezuela, en Grecia ahora y España. En ese sentido afirmó que en la política se producen muy pocos casos en que las personas abandonan voluntariamente el poder que poseen, por degradado que éste se encuentre.