Grecia está a un paso de convertirse en el primer país industrializado en declararse en default ante el Fondo Monetario Internacional (FMI), si no paga este martes 1.600 millones de euros que adeuda.
En la mañana, el primer ministro griego Alexis Tsipras manifestó que estudiaba una propuesta de último momento del presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker. “Mi teléfono permanecerá prendido todo el día, si alguien llama, siempre respondo.”, había advertido Tsipras, aludiendo a una reanudación de las negociaciones.
Entretanto, prevalecía el escenario de una cesación de pagos, aunque se presume que el FMI se tomará su tiempo para oficializar esta situación, a la espera de que Tsipras y sus acreedores vuelvan a sentarse a buscar una salida de la crisis.
Otro factor de incertidumbre es el desenlace del referendo al que Tsipras convocó este domingo para que los ciudadanos se pronuncien por un “Sí” a las propuestas de los acreedores o por un “No” a estas condiciones, postura defendida por el premier griego.
“¡Oxi! ¡Oxi!”
Este lunes, unas 17.000 personas se reunieron delante del Parlamento al grito de “¡Oxi! ¡Oxi!” (¡No!, ¡No!), expresando su apoyo a Tsipras, quien aseguró que esta consulta es un medio para contar con “mejores armas” en las negociaciones con los acreedores. Si un “No” masivo gana, el país estaría en una posición más sólida en las discusiones, dijo en la televisión pública ERT.
Tsipras dramatizó el resultado del referendo y dejó entender que no permanecería en su cargo en caso de una victoria del “Sí”. “No soy un primer ministro que se mantenga en el puesto pase lo que pase”, advirtió el lunes. Por otro lado, reafirmó que no piensa que los acreedores quieran que Grecia salga de la zona euro, porque sería demasiado costoso para ellos. Quieren sobre todo “poner fin a la esperanza de que haya una política diferente en la zona euro”, sostuvo el Premier griego, quien conserva una popularidad del 45%.
En este contexto de incertidumbre, los socios europeos de Grecia intentan medir el impacto de las decisiones de Atenas. Desde Francia, el ministro francés de Finanzas, Michel Sapin, estimó que un impago de Grecia al Fondo Monetario Internacional no tendría “grandes consecuencias”.
Sin embargo Sapin opinó que ese referéndum sí tendrá consecuencias. “Sí dicen ‘sí’, seguiremos negociando (…) Tras el ‘no’, entramos en un terreno totalmente desconocido con verdaderos riesgos y, ante todo, riesgos para la propia Grecia”, recalcó.
En tanto, desde Madrid, el jefe del gobierno español, el conservador Mariano Rajoy señaló este martes que una victoria del ‘sí’ en el referéndum del domingo sería positiva para Grecia porque permitiría a sus acreedores negociar con un nuevo ejecutivo.
Mientras, las bolsas europeas relativizaban el vencimiento de este martes, con leves variaciones orientadas a la baja.