Javier Zabala nació el año 1962 en España. Allí la ilustración lo eligió, como bien dice. Todo se inició cuando de manera natural “garabateó” ciertos dibujos en los periódicos de su padre. Así, luego de estudiar Ilustración y Diseño Gráfico en las Escuelas de Artes de Oviedo y Madrid, llegó a trabajar en diversas revistas, ilustrar más de 80 libros, publicar en las editoriales más importantes de su país e incluso, ganar en el año 2005 el Premio Nacional de Ilustración de España.
Incluso Zabala también llegó a Chile. Esto ya que por estos días participa de las actividades del Festival Internacional de Ilustración, Festilus 2015, que hasta el 18 de agosto liderará PLOP! Galería.
En este contexto, y en el marco de las actividades del Festival, el dibujante declaró que en Chile existe un importante potencial en el ámbito de la ilustración, talento que en su opinión, no ha llegado a expandirse, pero que sin embargo, se encuentra en crecimiento.
¿Qué nombres de ilustradores Chilenos te llaman la atención?
Yo conozco a dos ilustradores chilenos, Fernando Krahn y Leonor Pérez, pero el problema es que las publicaciones chilenas no llegan a Europa, entonces tampoco tenemos un gran conocimiento. Sí sé que desde el punto de vista de la ilustración, y te lo digo muy sinceramente,Chile está cada vez más alto y saliendo en publicaciones internacionales. En Italia siempre aparecen cada vez más nombres chilenos y llama la atención las ilustraciones. Sin embargo, lo que está claro es que el crecimiento de la ilustración en Chile es exponencial, así que hay que ponerse cada vez más al día.
¿Cómo podrías describir la ilustración chilena? ¿Existe un universo común visto desde afuera?
Antes de venir aquí yo vi distintas ilustraciones y bueno, como en todas las ilustraciones profesionales hay de todos los estilos. Yo creo que con el fenómeno de Internet y las globalizaciones, una de las cosas que sucede es que se van homogenizando los estilos, incluso en países tan lejanos. Por ejemplo, en México, Francia, Inglaterra o Irán, hay personas que trabajan muy parecido, pero muchas veces los ordenadores anulan a los artistas que hay detrás, pero yo creo que eso pasa en Chile, en España y en todo sitio.
¿Por qué te interesaste en la ilustración?
Hay una frase que se dice siempre: la ilustración te eligió a ti, no tú a ella. Y yo creo que es algo inevitable. De pronto yo estaba dibujando cuando tenía 9, cuando tenía 10 y hacía garabatos en los márgenes del periódico de mi padre y él se enojaba. Y no sé, mi motor es dibujar siempre, siempre, siempre. Es algo natural, es una vocación y en realidad es una forma de vida.
¿Se puede vivir de la ilustración?
No creo que sea una vocación fácil. Tiene toda la complicación de las profesiones liberales. Tienes que buscarte un trabajo que no es cotidiano y luego, ya viene el problema de las creaciones artísticas, pero es algo personal. Yo creo que se puede vivir de ella, pero ahora hay mucha competencia, no hay tantísimas editoriales y yo creo que si quieres vivir sólo de esto, tienes que tener un nivel muy alto y también tienes que ser capaz de organizar un montón de actividades que son paralelas a la ilustración, incluso ser tu propio relacionador público, pero fuera de ello, es muy apasionante.
El desarrollo tecnológico, ¿ayuda o limita el desarrollo de la ilustración?
Hay que mirar el fenómeno a partir de dos puntos de vista: uno sería las nuevas tecnologías como herramientas de trabajo, pero no deja de ser una herramienta como un pincel o como un rodillo de grabado. Lo que pasa es que te da los resultados muy inmediatos y a veces, obtienes unos resultados muy automáticos que se asemejan mucho a los que puede tener cualquier persona que tenga ese programa de ordenador en cualquier lugar del mundo y puede ser que esto, eclipse la personalidad del artista que está detrás, pero eso es culpa del artista. O sea, tú tienes que tener la responsabilidad de utilizar las herramientas de la manera en que estas herramientas te permitan ser creativo.
Dentro de tu trabajo también has ilustrado muchos libros, ¿por qué trabajar la ilustración desde la literatura?
Yo últimamente, hace unos dos o tres años, les propongo a mis editores amigos el trabajo y el libro que me gustaría hacer. A mi me gustan los clásicos, pero existe un problema con los textos; no hay tantísimos profesionales que ilustren libros, entonces esto produce que los escritores no entiendan que estos textos tienen dos lenguajes y que tiene diferentes lecturas Entonces, si ellos hacen un texto demasiado narrativo, están metiéndose en le terreno de la ilustración. No sé hay una interacción entre texto e imagen que es necesaria y que hay que conocerla. Los ilustradores tenemos contacto con los dos lenguajes y los manejamos y sobretodo podemos hacer la tercera lectura que es la mezcla en el texto y la ilustración.