La creación del primer Banco de Leche humana surgió como una iniciativa dependiente de la Unidad de Neonatología del Hospital Sótero del Río. El proyecto busca alimentar con lactancia materna a los recién nacidos extremos, es decir, aquellos nacidos antes de las treinta y dos semanas de gestación o pesando menos de un kilo y medio.
La doctora Patricia Mena, coordinadora del Banco de Leche Materna, señala que la demora de la implementación del proyecto en Chile obedeció a impedimentos de tipo legal: “Las restricciones existían en la norma de VIH del Ministerio de Salud, estaba prohibido en Chile donar leche materna y los bancos de leche. Ésta prohibición se eliminó a fines de junio. Hubiésemos querido empezar antes pero los equipos se demoraron en llegar”.
Prematuros extremos
La doctora en Salud Pública Paulina López, académica de la Escuela de Obstetricia de la Universidad de Valparaíso, publicó recientemente un estudio titulado Tendencias de la edad gestacional y el peso al nacer en Chile desde 1991 hasta 2008. El estudio epidemiológico descriptivo arrojó un aumento en la taza general de prematuros de un 5 a un 6,6 por ciento en los últimos 20 años. La cifra general no se constituyó como un aumento de suma significación, pero al momento de analizar las categorías o subgrupos las cifras mostraron incrementos dramáticos.
Los nacimientos prematuros extremos, de menos de 32 semanas de gestación, aumentaron 32,3 por ciento para los hijos únicos y 50,6 por ciento para los nacimientos múltiples. Además se observó un incremento de un 42 por ciento en los nacidos cuyo peso fue inferior a los mil 500 gramos.
“Lo alarmante de todo esto es que los recién nacidos que tienen mayor morbilidad, mortalidad y secuelas son precisamente los que más están aumentando”, concluye la doctora López.
Lactancia y fórmulas
La matrona de la Universidad Católica Pascale Pagola, especialista en parto y puerperio, asegura que uno de los problemas a los que se enfrentan las madres de niños prematuros es el de la lactancia materna: “Emocionalmente es muy fuerte y si a esa mamá no se la integra en los cuidados de su hijo prematuro, si no se abren las neonatologías con programas como éste, se hace más difícil todavía porque las madres se desvinculan un poco de sus guaguas, no producen la leche suficiente”, explica.
La lactancia materna ha sido destacada por la Organización Mundial de la Salud como el alimento más completo para los recién nacidos, recomendando su ingesta exclusiva hasta los seis meses y de manera complementaria hasta al menos los dos años de edad. En este sentido, no existiría comparación entre las formulas alimenticias y la leche materna, pues ésta tendría dentro de sus componentes células vivas que estimularían el desarrollo físico, cerebral e inmunitario de los lactantes.
Morella Contreras, Consejera Internacional en Lactancia Materna Acreditada en la Liga de la Leche, reconoce los beneficios de la iniciativa y enfatizó en la necesidad de seguir promoviendo este tipo de alimentación “Me parece una gran iniciativa, pero si nos volcamos solamente a la instalación de puros bancos de leche, pero no trabajamos lo que es la promoción y la protección de la lactancia materna que incluye el velar, fiscalizar e implementar el Código Internacional de Sucedáneos de Leche Materna, vamos a estar perdiendo de vista algo muy importante”.
En materia de alimentación a recién nacidos, la cifra de consumo de formulas alcanza el 50 por ciento en nuestro país. Lo que demuestra que las políticas destinadas a la promoción y protección de la lactancia materna son insuficientes. El Banco de Leche humana podría, en definitiva, ayudar a disminuir las tasas de uso de suplementos y mejorar considerablemente la respuesta cerebral e inmunitaria de los lactantes.
Temas pendientes
Sobre la posibilidad de extender el Banco de Leche a todos los lactantes que lo requieran y no sólo a los prematuros extremos, la doctora Patricia Mena advirtió que no es algo que dependa exclusivamente de ellos: “Entiendo que hay grupos en el Ministerio a los que les gustaría hacer algo un poco más amplio, especialmente para los lactantes hospitalizados, pero eso requiere recursos de otro nivel”, advierte.
Antes de la implementación de este proyecto, Chile era el único país de Latinoamérica que no poseía un banco de este tipo, quedándose atrás en comparación a otros Estados de la región, como Brasil que cuenta con más de doscientos en todo su territorio.