No fue una semana sencilla para los integrantes de la Nueva Mayoría. La imposibilidad de inscribir a los candidatos para las primarias municipales reflotó las diferencias conceptuales que existen dentro del conglomerado quebrando las confianzas y enfrentando a sus dirigentes a través de los medios de comunicación.
Situación que preocupa al alcalde de Recoleta, Daniel Jadue, quien hizo un llamado a la Nueva Mayoría a “desdramatizar” el tema y a trabajar en el proyecto que el oficialismo presentará a la ciudadanía en las próximas elecciones municipales.
En ese sentido, el edil valoró el trabajo que ha hecho en su comuna y que se ha destacado con iniciativas como la farmacia y la más reciente óptica popular, las cuales han sido copiadas por otras comunas incluso de tendencia política opuesta a la Nueva Mayoría.
¿Qué le pareció lo vivido esta semana por la Nueva Mayoría?
Desdramatizo lo que ocurrió, no soy de los que creen que se puede delegar en gente que a veces no participa en todo el año de la política la decisión respecto de proyectos políticos tan relevantes. En Recoleta estábamos dispuestos a tener primarias, pero nadie las pidió. Las primarias no son la panacea cuando se llega al acuerdo de que alguien representa de mejor manera un proyecto político. De todas formas lo que ocurrió denota una falta de trabajo y rigurosidad que hay que seguir corrigiendo, pero no hago de este paso en falso algo que ponga en riesgo la credibilidad del conglomerado. No comparto esto de la crisis política, de hecho no creo en eso que llaman “la clase política”, no todos somos iguales y si bien fue un error, lo relevante sigue siendo ofrecer a la comunidad un proyecto transformador.
Hay quienes consideran que lo que pasó fue que se buscó proteger liderazgos específicos por sobre la participación ciudadana.
Esa afirmación parte de una base que no comparto y que es que las primarias son la panacea, de hecho no creo que sean necesarias en todas partes, en Recoleta nadie pidió primarias, eso tiene que ser porque se valora el proyecto que logra concitar el apoyo de todos y en eso hay que ser transparentes, a veces la primarias no ayudan cuando están guiadas por apetitos personales, eso constituye incluso una trampa para que miembros de un conglomerado se enfrenten antes de una elección, lo relevante es qué programa de gobierno, en el ámbito local, va a ofrecer la Nueva Mayoría a la gente.
¿Existen en la Nueva Mayoría personas interesadas en acrecentar este tipo de problemas?
Efectivamente hay muchos que por robar cinco minutos de fama son capaces de hacer daño al proyecto, soy consciente de que hay personas muy permeadas por lo valores del neoliberalismo en el conglomerado, pero ese es un tema que debe analizar cada partido, de hecho, me preocupa más lo que dicen las instancias regulares de los partidos que lo que puedan opinar muchos militantes que siempre critican y que tienen muy poca participación, hay un tema de doble estándar que cada partido debe resolver.
¿Considera que estas elecciones serán un juicio a la Nueva Mayoría como plantea la derecha?
La derecha no tiene ética ni moral para plantear un juicio a nadie, si ellos tratan de instalarse como la vara o la medida de la ética y moral se equivocan y no se han dado cuenta que ellos están hoy en el suelo y representan una vergüenza nacional, porque además de haber estado involucrados en un sistema político que ellos diseñaron para que el aparato económico coopte a la política, ellos mismos no se han hecho cargo de los planteamientos que hoy cursan en la sociedad. Yo creo que las próximas elecciones van a poner el foco en un proceso que tiene que ver con el punto de inflexión que Chile está viviendo y que el comienzo de una verdadera transición a la democracia.
Las iniciativas que ha impulsado en Recoleta demuestran que, a veces, avanzar en justicia social depende de la voluntad más que de las trabas que imponga el sistema.
Efectivamente, cuando algunos actores se convencen de que el mercado debe solucionar problemas esenciales se termina dejando a una cantidad importante de población sin servicios y en eso los gobiernos locales debemos tomar la iniciativa y hacernos cargos de verdad de nuestros territorios. Tener una óptica dentro de la comuna, a un precio justo, es un tema que a nadie puede dejar indiferente. Ésta es una demostración que hay una demanda de la ciudadanía que nadie está solucionando.
¿De qué depende que se puedan llevar a cabo estos cambios?
Depende mucho de la voluntad, de la predisposición a hacer los cambios, depende de no desanimarse con los obstáculos normativos y depende de tener el respaldo de la comunidad, que es la que te da la valentía para hacer lo que hay que hacer. Hoy día tenemos numerosos alcaldes que nos están llamando para preguntar cómo se hace una óptica popular, y desde el primer día hemos puesto a disposición los procedimientos para llevar esto a todo Chile.
¿Cómo asume el hecho que las medidas que se impulsan en la comuna terminan siendo copiadas por otras autoridades?
Lo asumo como una responsabilidad, estamos tratando de hacer una gestión con el foco puesto en la salud de las personas, estamos satisfechos y orgullosos.