El problema del millonario déficit de la salud púbica en el país obedece a una mala gestión del ministerio, de los directivos de hospitales, además de una profunda falencia en la estructura del modelo.

Así lo dio a conocer el director de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Chile, Óscar Arteaga, quien aclaró que el problema estructural que afecta a los hospitales, es la principal causa de la deuda en los centros de salud, a pesar de la inyección de recursos aumenta mes a mes.

Sin embargo, detalló que la externalización, la compra de servicios e insumos al sector privado, que aumenta los precios abrumadoramente, sobrepasa hasta el mejor directivo experto en gestión hospitalaria, a quien se le exige cumplir con la demanda de la población.

“Independientemente de las capacidades de gestión una persona que asume la responsabilidad superior de un hospital, circunstancias que determinan márgenes de maniobra para los equipos gestores que son muy estrechos, con las que él o ella se pueden manejar para poder enfrentar la gestión del hospital, una son los precios, la segunda que está vinculada con esto, son los costos, y el tercer punto es el volumen de producción, la cantidad de prestaciones que se hacen”.

El director de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Chile agregó que se debe modificar el sistema de financiamiento, las prestaciones y mejorar la gestión, a través de una instancia profesional autónoma, que no dependa del Ministerio de Salud ni los gobiernos de turno.

Indicó que la carencia de recursos humanos en los hospitales es otra de las falencias del sistema, que se debe mejorar con políticas públicas sostenibles en el tiempo, de amplio acuerdo, y que no se modifiquen por una decisión política.

“Que el país defina si le parece razonable que la gerencia general del sistema público prestador está en el Ministerio o fuera de él. Yo soy partidario de sacar esa responsabilidad del Ministerio de Salud, de modo de especializar un nivel nacional a modo de directorio como existe para el Banco Central, de gente de muy alta calificación, con autonomía decisional, que vayan pensando cómo se van desarrollando políticas y estrategias que apunten a fortalecer el sistema público prestador”.

El doctor Óscar Arteaga admitió que la inyección de recursos para atenuar el déficit operacional de hospitales es necesario, sin embargo, recalcó que se debe pensar en una nueva forma de gobierno hospitalario, donde los gestores puedan operar.

Sentenció que “hoy hay costos fijos elevados, como las remuneraciones y prestaciones; Fonasa fija los precios que paga a los hospitales, y estos, además, no pueden dejar de atender cuando están sobrepasados. Entonces, no tienen margen de maniobra y el problema continúa como una cadena interminable”.