Masivas manifestaciones se registraron este miércoles en Caracas, la capital de Venezuela.
Convocados por la denominada Mesa de Unidad Democrática, la oposición se concentró en Plaza Altamira, mientras que una importante movilización se registró en apoyo al Gobierno de Nicolás Maduro afuera del Palacio de Miraflores, sede del Ejecutivo de esa nación suramericana.
El propio Maduro encabezó la concentración saludando la actitud pacífica de ambas manifestaciones, al tiempo que llamó a la oposición a terminar con el intento por empujar al país hacia la violencia. “Si uno se pone a inyectar odio, intolerancia, el resultado es la violencia y la derecha venezolana ha tomado el camino del odio, quiere el camino de la violencia”.
Una vez más, Maduro responsabilizó al Gobierno de los Estados Unidos de estar detrás del intento por derrocarlo, una medida que está en la planificación, hasta ahora sin resultados, del propio Presidente Barack Obama.
Maduro reiteró su convocatoria a un diálogo nacional el que se espera se concrete este domingo 30 de octubre con la mediación de tres ex mandatarios y un enviado especial del Vaticano por el Papa Francisco.