El 29 de noviembre de 1984, a diez años de la detención y desaparición del camarógrafo Jorge Müller y la cineasta Carmen Bueno por agentes policiales de la dictadura, un grupo de cineastas decidió, como un gesto de resistencia cultural, hacer de este día una fecha conmemorativa del cine chileno y la recuperación de la memoria. En ese marco, la Casa de Bello conmemorará el Día del Cine Chileno con la exhibición de la versión restaurada de Descomedidos y chascones de Carlos Flores (1973), parte del ciclo “Documentales chilenos: memoria y archivo” de Sala Sazié-Cineclub, iniciativa impulsada por la Vicerrectoría de Extensión y Comunicaciones y la Cineteca de la U. de Chile.

“Desde el 2009 la Cineteca de la U. de Chile conmemora el Día del Cine Chileno con el objetivo de recuperar el sentido original de esta fecha, una actividad de recuerdo y denuncia, pero también de reencuentro, donde nuevas generaciones han establecido vínculos con la memoria social del país”, explicó Luis Horta, coordinador de la Cineteca.

Descomedidos y chascones corresponde a una película filmada en la época de la Unidad Popular en la que se retratan los modos de coexistencia de la juventud chilena durante este período. Se recogen sus impresiones sobre el contexto en el que viven y se propone una visión crítica mediante una mirada de ensayo audiovisual. Es el único largometraje documental producido íntegramente por Cine Experimental, y su estreno quedó abortado por el golpe de Estado de 1973, siendo recuperado y estrenado por la Cineteca de la U. de Chile en 2010.

El filme de Carlos Flores, profesor reconocido este año como mejor docente del Instituto de la Comunicación e Imagen, cuenta con registros cinematográficos realizados por Jorge Müller y escenas tales como las de los trabajadores de la industria Textil Progreso, el Festival de Rock Progresivo efectuado en Viña del Mar, los Trabajos Voluntarios de verano de la FECh, entre muchos otros contextos que permiten mirar a las y los jóvenes de la década del setenta.

La actividad de Sala Sazié-Cineclub es parte de una serie de otras instancias coordinadas por la Cineteca de la U. de Chile junto a la Corporación Parque por la Paz Villa Grimaldi y el Festival de Cine Social, donde también destaca la exhibición de Prisioneros desaparecidos de Sergio Castilla (1979) en el Parque Villa Grimaldi, ex centro de tortura y exterminio de la dictadura militar en Chile.

Noviembre: cine en torno al archivo y la memoria

“Documentales chilenos: memoria y archivo” corresponde al ciclo de películas que durante noviembre Sala Sazié-Cineclub exhibirá de forma gratuita en Casa Central de la U. de Chile, con películas como Gringo Rojo de Miguel Ángel Vidaurre (2016) -a exhibirse el 15 de noviembre- y De la sala de clase a la lucha de clases de Renato Dennis (2016) -estreno a exhibirse el 22 de noviembre-.

“Nos interesaba trabajar un tema bastante contemporáneo, que es la recuperación de archivos y su uso desde un punto de vista más bien irreverente en el lenguaje”, señaló Horta, agregando que “a partir de eso hicimos una selección de películas que trabaja el archivo como materialidad oral, de recuperación de patrimonio audiovisual, recuperación de fotografías, testimonios y una serie de operaciones de lenguaje que finalmente lo que están haciendo es demostrar o dar cuenta de que el Archivo hoy día también es una manifestación de despliegues y de operaciones de dispositivos de lenguaje cinematográfico”.

De la sala de clases a la lucha de clases corresponde al registro del movimiento estudiantil 2011 donde las y los jóvenes protagonizan una de las mayores protestas conocidas en la historia contemporánea chilena. El filme tendrá su estreno este 22 de noviembre en Sala Sazié-Cineclub y se ubica como la tercera película del ciclo “Documentales chilenos: memoria y archivo”. “Esta es una película que nos interesa mucho mostrar, porque da cuenta de los procesos contemporáneos políticos que se están viviendo en el país, al mismo tiempo que es un filme al que otros espacios no darán cabida, precisamente por su carácter de reflexión crítica”, afirmó el coordinador de la Cineteca de la U. de Chile.

Muchos de los filmes exhibidos en Sala Sazié responden al interés de abrir un espacio no sólo enfocado en la difusión, sino también en la reflexión y formación de espectadores críticos. Para ello, cada sesión de Cine en Casa Central cuenta con un espacio de análisis entre el público e investigadores, académicos y realizadores. “Son diálogos horizontales donde el público puede preguntar, puede reflexionar y hacer circular sus ideas de manera libre”, explicó Horta.

Por su parte, el ciclo “Documentales chilenos: memoria y archivo” contará con la participación de Miguel Ángel Vidaurre, director de Gringo Rojo y Renato Dennis, director de De la sala de clases a la lucha de clases.