En mayo de 2016 el archipiélago de Chiloé vivió una de las catastrofes ambientales más crudas: la marea roja más agresiva de la que se tenga recuerdo. Muchos vincularon este fenómeno al vertimiento indiscriminado de salmones muertos, lo que habría provocado el inusual desequilibrio ecosistémico. La población se tomó las calles, cortó los accesos al continente y durante cuatro semanas sostuvieron la movilización más grande de su historia.
Es en ese contexto que tres jóvenes cineastas viajaron para registrar este hito social, a partir de los cual generaron el documental Soberanía que aborda la reacción de la comunidad ante un desastre ecosocial que ellos llaman la muerte del mar.
“Los protagonistas del documental son las personas que levantaron la movilizacion en su cotidiano. No hay entrevistas a dirigentes, ambientalistas, autoridades o representantes de instituciones. Es una película grabada en la calle, al lado de quienes día a día sostuvieron las barricadas, fueron a las marchas, discutieron en sus casa sobre el conflicto”, sostiene María Jesús Torres, una de las directoras del proyecto.
Para dar continuidad al trabajo y lograr terminar la postproducción y la difusión se realizó una campaña online para reunir los fondos necesarios. “Este proyecto fue financiado a partir de una campaña donde el 50 por ciento de lo que necesitábamos fue aportado por donantes que consideran relevante realizar este tipo de documentales. A su vez el apoyo de la comunidad chilota vinculada al conflicto ha sido esencial para que este proyecto se de a conocer. Hay una necesidad por volver a comprender los acontecimientos de una movilización que fue muy potente”, comenta César Fuenzalida, otro de los directores.
Finalmente, en julio de este año, los audiovisualistas viajaron a Chiloé donde realizaron una muestra itinerante de este por las 10 comunas del archipiélago.
“Para nosotros, el principal objetivo era poder exhibir en el mismo territorio y que el documental sirviera como provocación para poder generar instancias de conversación y reflexión con los habitantes ya que, lamentablemente, este tema aún no ha terminado: las salmoneras y otras industrias de extracción siguen generando contaminación excesiva y la comunidad no ha podido articularse del todo para poder frenar y regular estos macroproyectos como la minería, la mitilicultura, la pesca industrial y la salmonicultura”, agrega Carlos Montes de Oca, otro de los tres realizadores.
Es así como el documental se estrenará en Santiago el día 12 de octubre en el Centro Cultural Espacio Elefante (Compañía de Jesús 1264). Luego se exhibirá en el marco del Festival de Cine Sustentable de la Universidad Católica. Finalmente, para la región del Bío Bío, en Concepción y Tomé se exhibirá los días 13, 14 y 15 de octubre.
Más información en aquí.