Iba a ser en la Sala Arrau, ubicada junto a la fachada y hacia calle Agustinas, pero se cambió a última hora. Finalmente, fue en el escenario principal donde el alcalde Felipe Alessandri y el director del Municipal de Santiago, Frédéric Chambert, hicieron al mediodía de este martes la presentación de la temporada 2018.
Claro, en la Sala Arrau se hubiera escuchado con más claridad la protesta del Sindicato Técnico que desde la semana pasada se encuentra en huelga legal. Cada día, sus 90 miembros se manifiestan ruidosamente en el frontis del teatro y siguieron haciéndolo mientras adentro se adelantaban las actividades del próximo año.
A la misma hora, había un tercer foco de atención: a unas pocas cuadras del Municipal, en la Dirección del Trabajo, representantes de la administración y del sindicato se sentaron a una mesa de negociación, por primera vez desde que se iniciara el conflicto.
En la presentación, Alessandri respaldó la gestión de Chambert y dijo que “estamos agotando todos los esfuerzos” para resolverlo, “pero una prioridad para esta administración también es mantener la casa ordenada, no solo financieramente sino que también con buenas relaciones laborales. En eso, agradezco y felicito la labor que ha hecho Frédéric con todo su equipo”.
El director del Municipal, por su parte, señaló que “por algún motivo que no quiero comentar mientras haya una mediación, el Sindicato Técnico se negó a aceptar la lógica aceptada por los demás sindicatos. Esa lógica, en el momento oportuno, la comentaré detalladamente y con mucho gusto contestaré sus preguntas, pero no quiero alimentar una polémica en un momento de conflicto”.
El ex director del Teatro del Capitolio de Tolouse habló también de “agresiones” producidas en medio de la paralización: “Cuando mi más cercano colaborador (el director de Administración y Finanzas, Patricio Gaete) tiene su nombre escrito sobre la fachada del teatro, cuando el público entra y le tocan bocinas en los oídos, cuando alguien me persigue en la vereda de San Antonio con Agustinas, etc., no es grave, pero es desagradable y no estoy seguro que sea totalmente legal tampoco. No quiero abrir polémica sobre eso, vamos a decir que son excesos que hay que controlar”, dijo.
Luego de la reunión en la Dirección del Trabajo, la presidenta del sindicato, Emelyn Valenzuela, dijo no haber sacado mayores conclusiones: “Pensamos que íbamos a acercarnos por lo menos a conversar en una mesa de negociación colectiva, pero lamentablemente la Corporación no llevaba otra propuesta, solo sostuvo el 1,1 por ciento de reajuste más bonos, manifestando claramente que es una decisión que ellos reciben por parte del director del teatro y por el presidente del directorio, que es don Felipe Alessandri”.
Según explicó la dirigenta, el sindicato -uno de los siete que existen en el teatro- pretende “que los bonos que nos están ofreciendo, que son diferenciados dependiendo del tramo de ingreso de nuestros representados, sean parte del reajuste real. Nosotros sacamos un estimativo y quedaría aproximadamente en un tres por ciento, pero obviamente son situaciones conversables y podemos buscar un término medio. Sin embargo, en base a situaciones impuestas, como lo han manifestado nuestros directores, es imposible el diálogo”.
La huelga del sindicato técnico ya afectó las funciones de la ópera Lady Macbeth de Mtsensk, que se ha presentado en una versión de concierto, y amenaza también el último título de la temporada, Aida, que debería estrenarse el 4 de noviembre: “Soy totalmente incapaz de decir sí habrá Aida o no. Espero que haya, pero mi posición es más o menos la de la totalidad de los espectadores del Municipal. Ojalá lleguemos a un acuerdo”, admitió Frédéric Chambert.
“Hasta ahora ha afectado poco, porque los artistas están trabajando en salas de ensayo. Complica un poco la cuestión técnica, pero el sindicato que construye las producciones está trabajando en los talleres, así que podemos avanzar en eso. Sí es más complicado con el vestuario, pero existen soluciones. Aunque ya tuvimos que dar Lady Macbeth con una escenificación muy leve, hay tiempo todavía”, añadió.
De Dudamel a Farías
Antes de responder las preguntas sobre la huelga, Frédéric Chambert había hablado con orgullo y en extenso de la temporada 2018 del Municipal, que tendrá varias novedades.
Entre ellas, destacan visitas internacionales ilustres, como la Orquesta Filarmónica de Viena, que será dirigida por el venezolano Gustavo Dudamel en un programa consagrado a Brahms y Haydn. Eso será el 8 de marzo y dos días más tarde será el turno del violinista ruso Maxim Vengerov, quien tocará obras de Brahms, Franck y Ravel. A la semana siguiente, el aclamado intérprete dirigirá uno de los conciertos de la temporada de la Filarmónica de Santiago.
Entre las visitas también destaca la pianista china Yuja Wang, el guitarrista español Pepe Romero y la Paul Taylor Dance Company.
La temporada de ópera tendrá títulos como Don Giovanni, Tosca, Norma y El barbero de Sevilla, pero también algunas novedades: El Cristo de Elqui, la ópera que el compositor chileno Miguel Farías escribió con el sociólogo Alberto Mayol, basada en textos de Hernán Rivera Letelier; y Lulú, de Alban Berg, que será estrenada en Chile bajo la dirección de Juan Pablo Izquierdo, quien además asumirá como director emérito de la Filarmónica.
El Ballet de Santiago presentará obras como Don Quijote, Romeo y Julieta, La Cenicienta y La fierecilla domada, como parte de una temporada que también contempla el ciclo Grandes Pianistas, el retorno de los conciertos de mediodía, una segunda versión del ciclo de guitarra clásica y conciertos en iglesias de Santiago, entre otras actividades.
El detalle de la programación puede verse en Municipal de Santiago.