En 2010, la arquitecta egresada de la Universidad Católica de Valparaíso, Daniela Gutiérrez, comenzó a trabajar en un particular proyecto: la creación de un programa cultural que sería llevado a distintas zonas a través de la reactivación de la red ferroviaria del país.

Para ello, la gestora debió contactarse con el Grupo EFE y OFEPASA, quienes luego de estudiar la viabilidad de la propuesta, apoyaron la iniciativa.

Superada esta etapa, sin embargo, surgió un obstáculo: el financiamiento. Para poder resolver este tema la gestora cultural debió postular a dos Fondart que fueron rechazados: uno tenía que ver con la creación de un sitio web mientras que el otro se vinculaba con la ejecución de actividades culturales en las estaciones de trenes.

Pero en 2015 el rumbo del proyecto, que hasta entonces sólo parecía un sueño, cambió. Esto, luego de que el equipo liderado por Daniela Gutiérrez lograra el sustento requerido a través de un fondo de infraestructura cultural itinerante del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes (CNCA). Ese fue el origen del proyecto Trenzando, iniciativa que será presentada el próximo viernes 5 de enero en Valparaíso.

Este proyecto consta de una nave y cinco contenedores marítimos que fueron readaptados: uno de ellos es una cocina, otro un dormitorio para los encargados del proyecto, un tercero fue equipado como una oficina y otro corresponde a un escenario desmontable. El quinto es una sala destinada a realizar talleres.

“La idea de esta propuesta era tener los espacios básicos para poder desarrollar diversos tipos de actividades en estas localidades que carecen de infraestructura cultural”, comenta Daniela Gutiérrez.

Para la arquitecta esta iniciativa busca dar una respuesta a la centralización cultural que vive el país. Esto, a partir de la vinculación de distintas zonas. “El gran objetivo de Trenzando es poder entregarle a las localidades no metropolitanas una plataforma para que ellos puedan difundir sus riquezas, sus prácticas y saberes que tienen que ver con las dimensiones de arte, ciencia y tecnología. A su vez también les damos la posibilidad de acceder a bienes culturales de otros territorios”.

Actualmente, en el país existen cerca de 170 estaciones de trenes que se encuentran abandonadas. Sin embargo, con esta iniciativa se reactivarán los terminales ferroviarias del país. “Nosotros hicimos un catastro de estaciones entre Cabrera y Puerto Montt y la verdad es que es un patrimonio bien impresionante y también es bien interesante el estado de abandono que hay. Por suerte mucho se ha mantenido en pie, ya que en varias partes vive gente y también porque son estructuras súper sólidas”, dice la coordinadora de la iniciativa.

“Además, la identidad de las comunidades está muy vinculada al ferrocarril y el decaimiento de esta red, como una red de conexión territorial, fue muy dramática para la población que, de alguna forma, entró como en una crisis identititaria generalizada, porque  hay localidades pequeñas que no han logrado volver a reconstruirse luego del cierre de esta red”, añade Daniela Gutiérrez.

Trenzando se pondrá en marcha en marzo de 2018. La primera localidad en ser visitada será San Rosendo. A fin de año el equipo presentará el trabajo realizado en cada uno de los lugares visitados. Esto a través de una muestra que se exhibirá a través de contenedores a lo largo de todo el país.

“Queremos aprovechar la riqueza y diversidad del país, porque hay muchas localidades con prácticas y saberes complementarios y, de alguna manera, el centralismo ha hecho que toda la visión de desarrollo surja a partir de unos pocos. Entonces, queremos abrir la participación a todos”, concluyó Daniela Gutiérrez.