La derrota de la izquierda o “centro izquierda” en las elecciones presidenciales obliga a pensar en reordenamientos. La lectura que algunos hacen es que no se pudo cautivar a los votantes del sector lo que generó una alta abstención de los sufragios que podían favorecer a Alejandro Guillier.
En esta línea, el Partido Comunista por estos días busca rayar la cancha respecto de futuras alianzas que permitan hacer un contrapeso importante a las políticas que vaya a impulsar el futuro presidente Sebastián Piñera. Por esto es que reconocen la importancia que tiene el Frente Amplio con sus 21 parlamentarios, por lo que están llamando a la unidad.
El diputado Guillermo Teillier y Carmen Hertz, quien ocupará el mismo cargo a partir del 11 de marzo, ya han enviado mensajes a través de los medios de comunicación buscando generar puentes con el conglomerado nuevo.
Por ejemplo, el congresista del PC manifestó que es importante generar un bloque que abarque desde la Democracia Cristiana hasta el Frente Amplio, mientras que Hertz planteó que la cercanía que se tenga con el bloque que tiene a figuras como Giorgio Jackson y Vlado Mirosevic es fundamental para lograr representar a los sectores progresistas del país.
Pero hasta ahora desde el Frente Amplio las voces son principalmente de cautela ante las invitaciones y apuntan a un período de reflexión más profundo que debe tener la izquierda en nuestro país.
El diputado electo de Revolución Democrática, Pablo Vidal, no rechaza la idea de unirse con el Partido Comunista, pero rechaza la prisa que se está poniendo a la discusión.
“El proyecto político del Frente Amplio necesita nutrirse de otras fuerzas, puede ser el PC u otras, siempre he creído que el camino que debe recorrer el Frente Amplio es hacia allá, pero no sé si es el momento, porque creo que la Nueva Mayoría, y en eso incluyo al Partido Comunista, no han hecho toda la autocrítica que les corresponde. No sé además si se puede hablar de un pacto con la DC si ni siquiera sabemos si va a seguir existiendo tal como la conocemos”, dijo.
En tanto, el también diputado electo pero del Movimiento Autonomista Gonzalo Winter no está preocupado por ahora de generar alianzas a nivel de cúpulas ni de parlamentarios, puesto que él sostiene la tesis de que son las organizaciones sociales las que tienen que llevar adelante el destino de las fuerzas políticas.
“Tenemos que ir un paso más atrás y tener una reflexión muy profunda todas las izquierdas en Chile, porque hoy hay que reconocer que en nuestro país hay más de una izquierda, muy distintas entre ellas. Hay que hacer una reflexión profunda de por qué tantos chilenos y chilenas prefieren a Sebastián Piñera, lo que no es menor. A veces los discursos triunfalistas nos ciegan y no nos deja ver que hay un número importantísimo de chilenos que tiene un análisis distinto al nuestro”, señaló.
El congresista sostiene que el Frente Amplio no debe mostrarse compor o el oxígeno de viejos proyectos, pero debe tener cuidado con el riesgo de no marginalizarse dentro del espectro político, algo que la ciudadanía podría interpretar como desventajoso para la solución de sus problemas, más que se valore la consecuencia del joven conglomerado.
Un tanto más tajante fue la dirigente de Poder Ciudadano, Karina Oliva, quien considera que es momento de enfocarse en la ciudadanía más que en otros partidos.
“Se entiende que hay una descomposición de la Nueva Mayoría y nosotros no podemos juzgar los emplazamientos que haga el Partido Comunista u otros partidos al Frente Amplio. Lo que tenemos que hacer es no sólo reconstruir una mayoría social y popular en el país, sino que también tener la capacidad de liderar un proceso que haga trascender a todas las fuerzas transformadoras que están en el Frente Amplio, pero también convocar a fuerzas transformadoras que están fuera del Frente Amplio”, manifestó.
De esta forma, el Frente Amplio probablemente entrará en una discusión sobre si ser pragmáticos y fortalecer una oposición unificada contra Sebastián Piñera, o posicionarse como un referente contrario al llamado “duopolio político”.