Con la presencia de autoridades tanto de la Universidad, como de Gobierno y del Poder Judicial, además de académicos, funcionarios, y representantes de las y los estudiantes, se realizó el día jueves 30 de agosto la ceremonia de instalación del Decano Pablo Ruiz-Tagle Vial, como máxima autoridad de la Facultad de Derecho de la Universidad de Chile.
El profesor del Departamento de Derecho Público será quien lidere la Facultad en los próximos cuatro años, sucediendo al decano subrogante saliente, Claudio Moraga, quien estuvo en el cargo por cerca de tres meses tras la renuncia del Decano Davor Harasic.
En la ceremonia desarrollada en el Aula Magna de la Facultad, el nuevo Decano agradeció el apoyo de los profesores y planteó que la Facultad de Derecho de la Universidad de Chile debe estar presente en los grandes temas que se discuten en el país. “Somos un referente, un generador de conocimiento y un catalizador en torno a los temas del Derecho, a las reformas políticas y sociales, a las discusiones sobre Justicia y Educación y en todos los demás cambios que se promuevan en nuestra patria por los poderes ejecutivo, legislativo y judicial”, dijo Ruiz-Tagle.
En su discurso, Pablo Ruiz-Tagle se declaró como un Decano de toda la Facultad de Derecho, sin distinción entre adherentes, adversarios, ni estamentos. Como símbolo de ese compromiso, invitó a los representantes del Centro de Estudiantes de Derecho y de la Asociación de Funcionarios, a recibir la Medalla Andrés Bello con él.
“No se puede gobernar una institución tan grande con la fuerza de una sola persona. Para su gobierno y prosperidad se requiere del talento de muchas personas que realizan funciones académicas, funcionarias y estudiantiles que se deben sumar a un todo de una manera que en ningún caso signifique disolver su identidad”, destacó.
En sus palabras, el Rector Ennio Vivaldi destacó que “las características que expresa el Decano Pablo Ruiz-Tagle hacen especialmente auspiciosa la contribución que está llamado a hacer en un momento muy importante para la Facultad de Derecho y la Universidad de Chile”.
El Rector Vivaldi enfatizó además en que esta universidad pública es única para Chile. “El hecho de tener el tremendo poder que esta universidad tiene, lejos de ser un motivo de arrogancia, es un motivo de asumir una responsabilidad enorme. Somos una universidad pública donde están todas las ideologías, todos los credos políticos, todas las clases sociales, todos los orígenes geográficos del país. Tenemos entonces el potencial de la diversidad y un compromiso con la excelencia”.
Ambas autoridades coincidieron en rechazar toda acción de fuerza que implique afectar la convivencia universitaria, como son las tomas estudiantiles. “Las formas de la protesta y la desobediencia civil, que son admisibles en una sociedad y en una institución bien ordenada pueden incluir el ejercicio del derecho de petición, las marchas, las paralizaciones, el uso de propaganda y pancartas y toda clase de acciones que no impidan el funcionamiento académico ni las acciones de los que quieran continuar sus clases y actividades de docencia, investigación y vinculación con el medio o extensión”, sostuvo el Decano Ruiz-Tagle.
Por su parte el rector Vivaldi reafirmó que “la toma es el fracaso de la convivencia”, aunque reconoció que se necesita analizar “hasta qué punto hay un contexto nacional que hace más permisible un acto de violencia. De alguna manera hay algo en el ambiente y en la atmósfera que hacen que esa idea logre alguna justificación”, reflexionó.