La justicia chilena ordenó a la forestal Bosques Arauco, propiedad del Grupo Angelini, devolver 97 hectáreas a una comunidad indígena.
La sentencia fue dictada por Carmen Seguel, magistrada del Juzgado Civil de Cañete.
Esta inédita resolución reconoce el título de merced que data de 1904 y que fue presentada por la comunidad Ignacio Huilipan.
El documento también reconoce la Ley Indígena y el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
En esta línea, se estableció que Bosques Arauco traspasó “el límite natural de la propiedad, que debía llegar hasta el estero Chan Chan”.