Al menos 2.795 mujeres de 23 países de América Latina y el Caribe fueron asesinadas por razones de género en 2017.
Así lo señaló el Observatorio de Igualdad de Género de América Latina y el Caribe (OIG) de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).
En términos absolutos, es Brasil quien lidera la lista de femicidios con 1.133 víctimas confirmadas en 2017, pero si se compara la tasa por cada cien mil mujeres, es El Salvador la nación que cuenta con las cifras más alarmantes, pues, se registraron 10,2 femicidios por cada cien mil mujeres.
En Honduras la tasa de femicidios alcanza 5,8 por cada cien mil mujeres, mientras que en Guatemala, República Dominicana y Bolivia las mujeres asesinadas superaron las dos por cada cien mil.
Solo Panamá, Perú y Venezuela registran tasas inferiores a uno en la región.
“El feminicidio es la expresión más extrema de la violencia contra las mujeres. Ni la tipificación del delito ni su visibilización estadística han sido suficientes para erradicar este flagelo que nos alarma y horroriza cada día”, dijo Alicia Bárcena, Secretaria Ejecutiva de la CEPAL, quien llamó a los países a dar prioridad a las políticas públicas orientadas a prevenir, sancionar y erradicar todas las formas de violencia contra las mujeres en la región.
Ante la gravedad del fenómeno, 18 países latinoamericanos han modificado sus leyes para sancionar este crimen, tipificándolo como feminicidio, femicidio u homicidio agravado por razones de género: Costa Rica (2007), Guatemala (2008), Chile y El Salvador (2010), Argentina, México y Nicaragua (2012), Bolivia, Honduras, Panamá y Perú (2013), Ecuador, República Dominicana y Venezuela (2014), Brasil y Colombia (2015), Paraguay (2016) y Uruguay (2017).