La jueza Dobra Lusic se defendió este miércoles ante la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia del Senado, de las diversas acusaciones de irregularidades que han surgido en su contra, luego que fuese nominada para integrar la Corte Suprema.
La magistrada respondió a los cuestionamientos que pesan en su contra por fallar en una causa civil a favor del Banco de Chile, pese a estar inhabilitada por la Corte Suprema, de acuerdo a los antecedentes entregados por Radio Biobío.
A juicio de Dobra Lusic, “tengo la suficiente entereza moral para enfrentar estas críticas, de no tenerla no habría seguido en la carrera judicial”. En esa línea la jueza destacó que ha tenido una carrera intachable.
Respecto de los cuestionamientos por sus fallos en materia de salud, Lusic señaló que “yo no soy afiliada a las isapres, estoy en Fonasa, de manera que no veo por qué puedo ser considerada como candidata a las isapres”.
Dobra Lusic desestimó además que haya tenido un encuentro con el senador Guido Girardi para favorecer su nominación.
Sobre el caso del Banco de Chile respondió que “es un falso recurso de hecho. Me interesa despejar lo siguiente. Es un recurso que se da entre una parte y el tribunal. Cuando ingresa el recurso, la corte da cuenta de todas las inhabilidades, incluida la mía. Llevo 15 años inhabilitándome en causas del banco de Chile por un crédito hipotecario”.
Luego de la exposición de la magistrada vino el tiempo para que los senadores pudiesen plantear sus preguntas, en este contexto, el senador de la UDI, Iván Moreira, destacó que los cuestionamientos a su figura provenían del mismo sector que con anterioridad le había entregado su apoyo.
Por su parte, el senador de la DC, Francisco Huenchumilla, calificó las acusaciones contra Lusic como una “picantería”, ante lo que Lusic propuso “regular los medios de prensa”, acusando “ensañamiento” y “una virulencia despiadada”.
Luego de la sesión de la instancia legislativa, la jueza Dobra Lusic recibió los saludos de los senadores integrantes. La decisión de ratificarla o no como nueva integrante de la Corte Suprema recaerá en la sala del Senado, para lo cual se necesita de la aprobación de 2/3 de sus integrantes.