Son unos cuantos años de experiencia. Los músicos de La Flor del Recuerdo se reunieron en 2012 alrededor del repertorio popularizado por grupos como Los Panchos, Los Tres Caballeros y Los Tres Ases, pero recién ahora han editado su primer disco de estudio, Para que no me olvides.
“Llega en un buen momento de la banda, porque nos sentimos más acabados en el género, el estilo y la sonoridad que queremos transmitir”, explicó Cristóbal González (requinto y voz) en el programa Semáforo de Radio Universidad de Chile.
En la ocasión, el músico adelantó detalles del concierto de lanzamiento que realizarán este jueves 16 de mayo en el Teatro Universidad de Chile y dijo que “va a ser un resumen de lo que hemos hecho todos estos años, lo que hemos tocado en bares, calles y micros”.
Es decir, esa noche el grupo pondrá a prueba la destreza que ha adquirido tocando canciones como “Se te olvida”, “Contigo”, “Sabor a mí”, Sin ti”, “El reloj” y “La barca”, en ciudades como Santiago, Valparaíso, Rancagua, Talca y Frutillar.
Aunque ya habían registrado un concierto junto a la cantante Carmen Prieto y habían participado de un disco del pianista Roberto Bravo, Para que no me olvides es la primera publicación oficial de La Flor del Recuerdo.
Por eso, González recalcó que “desde los primeros años nos dimos cuenta de que la incursión en este género era algo muy complicado, mucho más difícil de lo que te imaginas a la primera. Desde nuestra visión es algo de mucha perfección, cuidado y delicadeza”.
Ese punto de vista tiene características singulares. Así como Cristóbal González es clarinetista de la Orquesta Sinfónica Nacional de Chile, Ricardo Aguilera (guitarra y voz) toca el corno y Cristián Gutiérrez (percusiones) se hace cargo del chelo en la agrupación orquestal. El cantante Pablo Moraga (Juanafé) y el contrabajista Eduardo Rubio completan la formación.
Aun así, “no hacemos ninguna diferencia entre la música popular y la música docta”, aseguró Aguilera. “Ocupamos las formas de estudiar música para estudiar el bolero, de la forma más respetuosa y profesional posible: que la quinta o la tercera sean afinaditas, que las cuerdas estén bien, que todo sea lo más puro posible. Es difícil lograrlo, pero nos vamos a morir en el intento”.
En ese sentido, el cornista de la Sinfónica contó que sus padres eran cantores y folcloristas, por lo que su aproximación a la música popular fue desde temprana edad: “Para mí era muy natural la guitarra, la quena, la Nueva Canción Chilena y todo eso”, dijo.
Asimismo, Cristóbal González habló sobre su infancia en Pichilemu y cómo su acercamiento a la música clásica fue recién cuando se integró a una banda instrumental de la ciudad: “Antes de estudiar tuvimos una iniciación en nuestras familias, en coros, en conjuntos folclóricos. Yo tocaba flauta dulce con mi papá, que tocaba guitarra, y él me enseñaba canciones de Violeta Parra, Víctor Jara y los Beatles. Al clarinete llegué en la banda instrumental y después mi profesor me regaló mi primer cassette de Mozart, en aquel tiempo”, recordó.
“El bolero se parece mucho a la música de cámara del periodo clásico, como Mozart o Haydn. Un golpe más o menos, una trasteada de la guitarra, embarra todo. Es tan delicadito, tan sutil y puro este género, que hay ciertas coincidencias”, concluyó Aguilera.
Se lanzan los boleros
La Flor del Recuerdo se presentará a las 19:30 horas de este jueves 16 de mayo en el Teatro Universidad de Chile (Providencia 043, Metro Baquedano). Las entradas tienen valores entre $7.000 y $15.000, disponibles en el sistema Daleticket. Más información en este enlace.