Buñuel en el laberinto de las tortugas está basada en la novela gráfica del mismo nombre del ilustrador Fermín Solís. Esa obra narra el rodaje en 1932 del documental Las Hurdes, tierra sin pan, en una de las zonas más miserables de España. Buñuel era entonces un joven en busca de su propio lenguaje, que gracias a un golpe de suerte de su amigo Ramón Acín, se embarca en esta aventura que lo transformó.
Hoy el director español Salvador Simó revela esta historia en una cinta de animación que puede verse en las salas de cine francesas.
“Lo que enseñamos en esta película es el nacimiento del gran Buñuel, de su voz, y de su manera de hacer cine huyendo de la influencia del surrealismo de Dalí. Buñuel quería rodar Las Hurdes con la intención de cambiar esa zona, mostrando algo que el público que iba a los cines en aquella época, no estaba acostumbrado a ver. De lo que no se da cuenta Buñuel es que Las Hurdes lo cambia a él”, expresó Salvador Simó.
Buñuel en el laberinto de las tortugas comienza en París, justo cuando el director español provoca un escándalo con la proyección de La edad de oro. Pero luego se cuenta cómo su amigo Ramón Acín y él se embarcan en la filmación de Las Hurdes, junto al poeta Pierre Unik y el fotógrafo Eli Lotar, y cómo Buñuel fue encontrando un estilo y un lenguaje que no abandonará nunca más.
“Acercarme a la figura inmensa de Buñuel fue una experiencia increíble, que atesoraré toda mi vida. Me ha enseñado que un artista debe ser fiel a su manera de decir las cosas, y satisface además participar a que muchas más gente lo conozca”, agregó Simó.
Buñuel en el laberinto de las tortugas llegó a las salas de cine francesas tras haber ganado el premio del jurado y a la mejor banda sonora en el Festival de animación de Annecy.