Como efecto del llamado a movilizaciones en el sector alto de la capital, un grupo de manifestantes logró derribar la reja de acceso de la sede de la Unión Demócrata Independiente para, posteriormente, ingresar a la casona.

Una vez adentro, quienes protestaban destruyeron parte del inmobiliario y dejaron rayados tanto al interior como al exterior de la propiedad.

“Golpistas”, “se lo merecen”, se leen en las paredes de la propiedad ubicada en Avenida Suecia.

Al lugar debió acudir Carabineros, quienes custodian la sede del gremialismo.

“La sede no la quemaron porque alcanzaron a llegar los carabineros que estaban acá cerca. Es decir, vandalismo puro”, comentó a EMOL la presidenta de la colectividad, Jacqueline Van Rysselberghe.