Fue en noviembre de 2019, en pleno estallido social, cuando el ciudadano estadounidense John Cobin disparó en contra una multitud, en medio de un tipo de protesta popularizada en dicha época y que recibió el nombre de “el que baila pasa”.
El saldo del hecho ocurrido en Reñaca, Viña del Mar fue el de dos heridos: un hombre con un disparo en la pierna y otro que recibió un tiro mientras conducía su vehículo cuando pasaba por el lugar. Por tal motivo, en octubre de 2020, Cobin fue sentenciado por el Tribunal Oral en lo Penal de Viña del Mar a 11 años cárcel efectiva.
Casi cuatro meses después de dicha sentencia, este jueves, la Corte Suprema determinó a través de un fallo unánime reducir la pena a seis años y un día de prisión, acogiendo con esto de forma parcial el recurso de nulidad interpuesto por la Defensoría Penal Pública.
Asimismo, el Máximo Tribunal recalificó el homicidio frustrado y de grado de tentativa, cargos por los que era procesado Cobin, por lesiones graves y daño delito de daños, respectivamente.
En cuanto al delito de disparo injustificado de arma de fuego, en grado consumado, la Corte Suprema decidió mantener la responsabilidad del acusado. Además, según lo determinado por la Sala Penal este jueves, no existió ánimo de dolo directo de matar en las acciones desplegadas por Cobin ese día.