Este martes en la Sala de la Cámara Baja se verificó la votación en particular del proyecto de ley de muerte digna y cuidados paliativos, conocido comúnmente como de eutanasia.
Originalmente la votación estaba programada para el jueves 15 de abril, sin embargo, se aplazó para esta jornada en favor de la discusión y votación de la reforma constitucional del tercer retiro desde los fondos de pensiones.
La iniciativa legal iniciada por la moción parlamentaria encabezada por Vlado Mirosevic pretende permitir que personas que padezcan enfermedades graves e irremediables, y que cumplan con determinados requisitos puedan solicitar la eutanasia o el suicidio asistido.
Los requisitos señalados son el que exista un diagnóstico de enfermedad terminal, que la situación de salud del paciente se caracterice por una disminución avanzada e irreversible de sus capacidades y que la dolencia o la disminución avanzada e irreversible de sus capacidades ocasione sufrimientos físicos o psíquicos persistentes e intolerables.
El proyecto prescribe que para optar a la eutanasia o el suicidio asistido se debe contar con el diagnóstico de al menos dos especialistas. Las diferencias entre una y otra forma de morir está dada porque en el primer caso será, precisamente, un profesional de la salud quien administre una sustancia al enfermo, mientras que en el segundo, el profesional facilitará los medios para llevar a efecto el requerimiento.
Respecto de la objeción de conciencia, la iniciativa legal dispone que tanto el médico requerido para practicar la asistencia médica para morir, como los otros profesionales que deban prestar funciones durante el procedimiento, podrán manifestar su decisión de abstenerse de practicarlo. En caso de suceder esto, el establecimiento de salud deberá reasignar al paciente a otro profesional no objetante.
Los requisitos de carácter formal señalan que el solicitante debe ser chileno, con residencia legal en Chile, o certificado de residencia que acredite un tiempo de permanencia en territorio chileno superior a doce meses; ser mayor de 18 años, estar consciente al momento de la solicitud o al momento de haber realizado un documento de voluntad anticipada, contar con la certificación del uso pleno de sus facultades mentales, descartando enfermedades de salud mental que afecten su voluntad y, finalmente, el manifestar la voluntad expresamente, de manera razonada, reiterada, inequívoca y libre de cualquier presión externa.
En cuanto al texto en particular, no se aprobó la disposición que buscaba cambiar el requisito de la mayoría de edad y se excluyó de la posibilidad de solicitar el derecho a la muerte digna de las personas menores de 18 años. También se rechazó una de las indicaciones agregadas por el oficialismo respecto de la objeción de conciencia institucional para llevar adelante este tipo de procedimientos y el que el sufrimiento que habilita a la solicitud pueda ser de carácter psíquico, por tanto, se aprobó una norma que explicita que el diagnóstico de una enfermedad psiquiátrica no constituye sufrimiento psíquico.
Otros asuntos que fueron votados en específico en el Hemiciclo este martes dicen relación con la extensión de los cuidados paliativos a pacientes no oncológicos, la obligación del Ministerio de Salud de dictar un reglamento para la aplicación del procedimiento para la eutanasia, la posibilidad de manifestar anticipadamente la voluntad de elegir la muerte digna, la prohibición de publicitar el procedimiento de eutanasia o suicidio asistido, entre otras disposiciones particulares.
Además, durante el debate se decidió la incorporación de un artículo transitorio para que el reglamento de aplicación de la eutanasia se dicte por el Minsal en un lapso de tres meses desde la promulgación de la ley.
El proyecto fue aprobado en la mayor parte de su articulado luego de más de siete años desde que fuera presentado y quedó listo para ser discutido por el Senado en su siguiente trámite constitucional.
Triunfó el derecho a elegir por sobre la obligación de sufrir. APROBAMOS #EUTANASIA.@Liberales_Chile #EstadoLaico #DerechosCiviles #LibertadesIndividuales
— Vlado Mirosevic Verdugo (@vladomirosevic) April 20, 2021
Del tabú al reconocimiento legal
Finalizada la votación, los parlamentarios autores de la moción manifestaron su satisfacción por el avance de la iniciativa. Desde la bancada socialista, la diputada Maya Fernández hizo hincapié en el avance que significa que en un Estado laico se reconozca la autonomía de las personas para poner fin a su sufrimiento de manera digna.
“Creo que hoy es el momento de decir que Chile avanza en un proyecto humano que busca la muerte digna, que está pensado en las personas que están sufriendo, para que ellas y ellos puedan tomar una decisión de poner fin a su vida, por una muerte digna. Lo que tengo que decir hoy es que tenemos un gran avance y esperamos que el senado vea este proyecto para que sea ley lo antes posible”.
En un sentido similar se expresó el representante del Partido Liberal, Vlado Mirosevic, quien además relevó el avance que representa la aprobación de este proyecto tanto para el Congreso como para que la sociedad chilena deje atrás concepciones conservadoras.
“Creo que hay algo que ha cambiado en la sociedad chilena y que también ha cambiado en este Congreso y es que lo que antes fue un tabú, lo que antes era obligar a sufrir, hoy por fin se are camino hacia la libertad, hacia los derechos civiles y a reconocer que frente a ciertas circunstancias de la vida tiene que ser la conciencia del paciente la que determine el camino a seguir. En este caso, aquellos pacientes que están sufriendo de manera extrema, tienen el derecho a partir en paz. Por eso es que este es un proyecto compasivo y humanitario”, finalizó el parlamentario.