La presencia de casos de variante Delta entre funcionarios de los jardines infantiles dependientes de la Junji, llevó a que las trabajadoras de este servicio mantuvieran su paro de actividades iniciado la semana pasada.

Durante la jornada de este lunes, dirigentes y empleados llegaron a la dirección nacional de la Junji donde insistieron en que se deben aplicar medidas de seguridad tanto para los niños que están en la red de la institución como para sus propios trabajadores.

Evelyn Villacura, presidenta regional metropolitana de Ajunji, indicó que “nuestra petición es que se cumplan las normas sanitarias y que haya aforo definido en nuestras unidades educativas para evitar un contagio masivo de la variante Delta. Porque es la vida de nuestros niños la que está en juego y la vida también de nuestras trabajadoras y de los hijos de nuestras trabajadoras”.

Por su parte, el diputado Boris Barrera, indicó que estos reclamos de los funcionarios “lo vienen insistiendo desde el año pasado y lo que piden son cosas de sentido común. El Gobierno habla del distanciamiento social, de mantener todas las condiciones para que no haya contagios y resulta que en todos lados se exigen esas normas, pero menos en los jardines infantiles”.

El parlamentario sostuvo que en los jardines no existe límite de la cantidad de niños al interior de los recintos y pueden estar agrupados sin distanciamiento social.

“Ya hay casos de variante Delta en los trabajadores de la Junji. Eso significa que también pueden contagiar a los niños, los niños pueden llegar a su casa y contagiar a sus abuelos. El Gobierno aquí como lo ha demostrado en toda la pandemia le preocupa las cosas, pero no las personas”, subrayó el legislador.

Los trabajadores de la Junji indicaron que esperan que las autoridades del Ministerio de Educación a través de la Subsecretaría de Educación Parvularia apliquen protocolos para la vuelta a la presencialidad en los jardines infantiles que dependen del servicio y así evitar nuevos contagios por Covid 19.