Requería 29 votos y obtuvo 30. En consecuencia, el Senado aprobó, este miércoles, la nominación del abogado Jean Pierre Matus Acuña para integrar la Corte Suprema. En contraparte, hubo cuatro votos en contra y tres abstenciones.
Ya este martes, la Comisión de Constitución de la Cámara Alta había aprobado el nombramiento de Pierre Matus para integrar el máximo tribunal del país. Entonces, votaron a favor de su nombramiento Luz Ebensperger (UDI), Rodrigo Galilea (RN), y Pedro Araya. En contra lo hizo Francisco Huenchumilla (DC), mientras que José Miguel Insulza (PS) se abstuvo.
El penalista reemplazará así a Carlos Künsemüller, quien dejó la Corte Suprema en febrero pasado.
En la presentación de la carta del Gobierno, el ministro de Justicia, Hernán Larraín, destacó la trayectoria laboral de Pierre Matus.
“Ha sido un colaborador activo en el proceso de formación de la ley. Entre 2003 y 2005, participó como miembro de la Secretaría Técnica de la Comisión Foro Penal del Ministerio de Justicia que participó en la redacción del Anteproyecto para el nuevo Código Penal de la nación y, desde 2010 a la fecha, ha participado de manera intensa asesorando –ad honorem– a esta propia comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento”, expresó el secretario de Estado ante los senadores y senadoras.
Sin embargo, el abogado ha debido enfrentar polémicas, especialmente por su relación con el Ejército, donde se le cuestionó por asesorar al comandante en jefe, Ricardo Martínez y defender al exdirector de la Dirección de Inteligencia (DINE), el general en retiro Schafik Nazal, en la denominada “Operación Topógrafo”.
Recordemos que este último caso refiere al espionaje que realizó el Ejército a cuatro funcionarios de la institución castrense, dos en servicio activo y dos en retiro, quienes denunciaron hechos de corrupción al interior del Ejército, siendo los objetivos el capitán Rafael Harvey Valdés, el cabo primero Sergio Andrés Tudesca Órdenes, el exteniente Carlos Farías Ramírez y el exsargento Juan Pablo Díaz Pino.
Este espionaje se suma a la “Operación W”, que consistió en la intervención telefónica del periodista Mauricio Weibel mediante una solicitud que el entonces general Schafik Nazal a la Corte de Apelaciones de Santiago por un período de 90 días, con el fin de interceptar las comunicaciones de una supuesta agente extranjera que recolectaba información de la institución. Esto fue autorizado, sin que se supiera que el número le correspondía al profesional. Todo esto luego que Weibel publicara en 2016 el libro “Traición a la Patria”, que aborda el millonario fraude del “Milicogate”, según dio a conocer CIPER.