En estas semanas previas a la segunda vuelta presidencial, los programas de gobierno de los aspirantes a La Moneda han tomado protagonismo, de la mano de los apoyos recibidos por coaliciones cercanas y la inclusión de propuestas de los derrotados candidatos presidenciales en el texto de un eventual plan de gobierno que presentarán de cara al próximo domingo 19 de diciembre.
En ese contexto, uno de los principales ejes que destacan en la ciudadanía se refiere a las propuestas laborales de ambos candidatos. Mientras por un lado, Gabriel Boric asegura mayor calidad de vida laboral, por otro lado, José Antonio Kast pretende flexibilizar el mundo del trabajo, lo que afectaría los derechos de trabajadores y trabajadoras en el país.
En conversación con Diario y Radio Universidad de Chile, el abogado laboral y profesor de Derecho de la Universidad Diego Portales, José Luis Ugarte, aseguró que en los programas de los presidenciables que avanzaron a segunda vuelta “hay una diferencia sustancial, prácticamente del cielo a la tierra” en materia de derechos laborales.
Para Ugarte, en el programa de gobierno de José Antonio Kast no hay una propuesta de trabajo, ya que enumera planteamientos que ya existen en la legislación del país y algunas ideas, incluso, son retrocesos para los derechos de trabajadores y trabajadoras, lo que la transformaría en “una propuesta de precarización”.
“Lo que hay es un pegoteo muy breve de un puñado de ideas, además, no muy bien reflexionadas porque algunas ya existen. Por ejemplo, se habla de trabajo por horas y eso ya es posible en la ley chilena. Otras son retrocesos en términos de derechos laborales. Se habla de que se va a proponer más que pagar por tiempo trabajado, por obras realizadas, por tareas cerradas o ejecutadas, y eso es precisamente lo que hace 100 años se avanzó con la jornada laboral. El empleador tiene que pagar por el tiempo que (el empleado) está disponible para él, más allá de que ese tiempo le resulte productivo en concreto o no al empleador. Eso se llama jornada de trabajo”, expuso Ugarte.
En esa línea, para el experto en derecho laboral es difícil evaluar las alternativas presentadas por el representante del Frente Social Cristiano, ya que lo descrito en su programa “parece un puñado más bien de intuiciones, de lugares comunes. No hay una suerte de mínima estructuración como para saber cómo enfrentar estos problemas”.
Sin embargo, en relación a las propuestas programáticas del programa de gobierno del candidato de Apruebo Dignidad, Gabriel Boric, el profesor de la Universidad Diego Portales asegura que ésta es “una propuesta que es muy ambiciosa”, dividida en dos ejes principales que reforzarían los derechos laborales.
“Ahí hay una propuesta laboral que tiene dos ejes. Uno es la reducción de la jornada, una propuesta que ha sostenido el Frente Amplio y Apruebo Dignidad, incluso desde antes del estallido que está la rebaja a 40 horas de la jornada semanal. La otra es un sistema de negociación colectiva de multired, es decir, que se pueda negociar no sólo en las empresas a través de los sindicatos, sino fuera de las empresas. Fundamentalmente, eso es lo que se llama negociación sectorial o ramal, que es una vieja demanda del sindicalismo chileno. Esa propuesta de Gabriel Boric probablemente es la propuesta más ambiciosa en materia de trabajo desde el retorno a la democracia”.
Incluso, consultado sobre las propuestas del candidato del Partido Republicano, José Antonio Kast, afirma que éstas están esbozadas “casi a título de slogan” y que no tienen ningún desarrollo. Además, en relación a la idea de despedir a unos 30 mil empleados fiscales por su plan de reducir de 24 a 12 ministerios, Ugarte asegura que su eventual implementación generaría diversos problemas de dimensiones políticas, y entramparía al eventual gobierno conservador.
“Requiere de modificaciones legales relevantes porque los trabajadores que podrían reducir son las plantas. Si son trabajadores de planta, requiere ley. Si son trabajadores a contrata, la jurisprudencia ha estado señalando que los funcionarios a contrata tienen cierto grado de estabilidad después de pasada la segunda contrata. Hay problemas políticos, hay problemas legales y, en el fondo, hay problemas de ideología. Porque ahí lo que hay es una gran ideología. Lo que está planteando Kast es a la ideología o al sentido común más que ideología o a esa especie de lugar común donde el Estado es muy grande. En el fondo, quieren minimizar el Estado. Ahora, la incógnita que surge de esa propuesta es cómo pretende mantener o incluso ampliar los servicios y derechos sociales reduciendo el tamaño del Estado. Eso parece sencillamente absurdo”, señaló el jurista.
Por otra parte, estos días han aparecido apoyos e inclusión de propuestas de otros candidatos presidenciales en los programas de gobierno de los aspirantes a La Moneda. En ese sentido, las coincidencias entre Gabriel Boric y Yasna Provoste, a juicio de Ugarte, se dan en “cuestiones sustanciales”. Sin embargo, asegura que la pregunta principal ante un futuro gobierno del representante de Apruebo Dignidad será saber si contará con el respaldo del ex mundo de la Concertación para realizar estas transformaciones.
“En materia de derechos de los trabajadores, la Concertación se caracterizó por un discurso muy retórico hacia los trabajadores pero con muy pocos avances. Yo diría casi nulos avances en materia de derechos de los trabajadores. La pregunta que hay que hacerse ahí es que si eso -en un eventual Gobierno de Boric- se va a traducir en una colaboración política efectiva para hacer esas transformaciones. Si uno mira la historia de la Concertación o de esos sectores, esa duda es bien legítima, porque se trató de un sector político bien reacio, bien tosco, a hacer a esas transformaciones. Básicamente, lo que nosotros hoy día tenemos por legislación laboral o derechos de los trabajadores es la estructura que nos dejó la dictadura. Muy débil, muy pocos sindicatos, sólo negociaciones a través de empresas, un derecho a huelga muy regulado en la ley que prácticamente es una huelga que no tiene mucho efecto”, expuso.
En ese sentido, Ugarte es enfático en asegurar que la propuesta laboral del candidato de Apruebo Dignidad representa el mayor avance en derechos laborales en estos últimos 30 años, y acercaría al país a los estándares internacionales que permiten un mayor equilibrio social. Para él, estas transformaciones suponen reformas sustanciales que deberían ser implementadas de manera gradual, en un sentido de menos a más y en diálogo con el ámbito empresarial y sindical que permitiría hacer los cambios que hoy son necesarios y que no se han realizado desde el año 1990.
“La propuesta laboral de Gabriel Boric es la más ambiciosa que se ha hecho a los trabajadores. Es la propuesta más ambiciosa y más intensa y más expansiva en término de derechos a los trabajadores desde el retorno a la democracia. Ahí lo interesante que puede hacer Boric es dialogar con el mundo de los trabajadores para llegar a una suerte de implementación gradual de los avances que ahí se proponen. Reducir la jornada y abrir un sistema de negociación colectiva multinivel o ir hacia un sistema de negociación ramal nos acerca a los estándares de la OCDE, de los países capitalistas con mayor equilibrio. Esas son transformaciones muy relevantes, particularmente la última. Esas transformaciones, más allá de ponerlas en un programa, en mi opinión, el paso siguiente es establecer un programa de implementación que tenga mucho diálogo con el mundo sindical”, sostuvo el profesor de la Universidad Diego Portales.