A la Cámara de Diputados y Diputadas fue despachado el proyecto que materializa la Pensión Garantizada Universal luego que el hemiciclo de los y las senadoras aprobara, por unanimidad, el proyecto con 37 votos a favor, cero en contra y cero abstenciones. Más tarde se aprobaron los artículos cuya votación se llevaron a cabo de forma separada, dentro de los que se contemplaba las pensiones de reparación que reciben víctimas de la dictadura para el cálculo de quienes reciben la PGU. Si bien se desarrolló un debate entre el oficialismo y la oposición dado que el gobierno consideró sólo el complemento y no el beneficio total para este segmento, dicho articulado se aprobó con 22 votos afirmativas y 14 abstenciones.
El proyecto, impulsado por el Ejecutivo, suscitó una valoración transversal en los y las legisladores en cuanto, más allá de las observaciones planteadas al momento de argumentar el voto, se ha considerado este un avance en vías de las tan anheladas reformas en materia de pensiones que se han buscado promulgar, pero que se han entrampado al interior del Congreso Nacional.
Así las cosas, la PGU fue sometida a una serie de modificaciones. El boletín 14588-13 que crea la Pensión Garantizada Universal, los legisladores de la comisión de Trabajo y Hacienda extendieron el beneficio a cerca de 56 mil personas a través de los pensionados de invalidez creando un subsidio para niños y niñas con discapacidades físicas y mentales severas, automatizando el beneficio.
En el pleno del Senado, el ministro de Trabajo, Patricio Melero, consideró la Pensión Garantizada Universal como un hito relevante en el sistema de seguridad social del país y el resultado de largos años de conversaciones en el Parlamento. Esto en cuanto irá a beneficiar a 2.481.798 personas; de pensiones de vejez, será un total de 158.278 los que recibirán la PGU en su complemento o totalmente, dependiendo de la situación de la pensión básica que se tenga y 323.520 serán los que reciben el beneficio desde la pensión de invalidez.
“Si esta ley se aprueba esta semana, hoy día en el Senado y el miércoles en la Cámara de Diputados y estamos en condiciones de promulgarla antes del 31 de enero, el Instituto de Previsión Social como también las instituciones pagadoras estarán disponibles para realizar el pago de ellas a partir de la tercera semana del mes de febrero y de ahí en adelante de acuerdo a los calendarios de pago, la van a recibir de manera directa, sin necesidad de tener que hacer trámite alguno, más de 1.520.000 personas que son los actuales beneficiarios de la pensión básica del sistema de seguridad que hoy día tenemos que es el pilar solidario y quienes están en el ahorro previsional voluntario”, indicó el secretario de Estado.
Pero las diferencias de los legisladores se hicieron escuchar. El senador Alejandro Navarro criticó el hecho que el Ejecutivo presentara la medida en su época de postrimería dado que, a su juicio, esto constituye “medalla para Piñera y la cuenta para Boric“, quien deberá asumir los costos de la medida que nace del fracaso del sistema de las AFP, arguyó.
“Yo creo que eso el gobierno lo tiene claro, los senadores de derecha, los que están y los que vienen tiene claro que el mandato ciudadano fue terminar con las AFP, no seguir subsidiando a las AFP porque esta Pensión Garantizada Universal lo único que establece es que universalmente las AFP han fracasado en todo el mundo, el 95,6 por ciento de los países del mundo no tienen AFP y por tanto en Chile han fracasado pero los platos rotos los paga el Estado, van para el fisco: socialista para las pérdidas, capitalista para las ganancias“, criticó.
Por su parte, el senador Juan Ignacio Latorre sostuvo que si bien la PGU puede considerarse como un primer piso de la seguridad social, el beneficio es insuficiente y de orden regresivo considerando que los sectores más pobres van a recibir un aumento precario -9 mil pesos de alza- mientras que los sectores medios recibirán un aporte mayor. En ese sentido, Latorre subrayó el hecho de que el monto que se propone está al límite de la línea de la pobreza actual.
“Nosotros, digo del equipo del presidente electo Gabriel Boric, en campaña, planteamos un piso de 250 mil pesos que no es antojadizo, es un piso que equivale a la línea de la pobreza para dos personas, adultos mayores y que constituye la mediana del gasto de los hogares de los adultos mayores, que esto aterrizado a la realidad concreta, todos sabemos el costo de vida de adultos mayores en precio de medicamentos, de alimentación, sabemos la cantidad de personas adultos mayores que tienen que seguir trabajando en la economía informal o formal para complementar las pensiones de miseria”.
Pensiones de reparación
Tras la aprobación de la PGU, se abordaron algunos artículos que se habían requerido votar en particular, tal como la situación de la ley Valech y la ley Rettig respecto al proyecto de ley. Bajo ese punto, el legislador del partido Socialista, Juan Pablo Letelier, reabrió un debate que fue librado en la Comisión de Trabajo del Senado dado que el gobierno no consideró a quienes reciben pensión de exonerados políticos, Rettig o Valech, en el beneficio de forma integra.
“Quiero decir que me duele que después de casi 50 años del golpe, donde se produjo una situación particular con puros jóvenes porque los que que fueron desaparecidos, la gran mayoría tenían menos de 26, 28 años, que las bancas del frente todavía no estén dispuestos a generar las condiciones para construir acuerdos que vayan más allá y que miren hacia adelante sin discriminar a las familias que cargan este dolor”.
Recogiendo las críticas de la oposición, el senador Rodrigo Galilea (RN) arguyó en la discusión que la ex mandataria Michelle Bachelet, para efectos de la creación del pilar solidario, excluyó a las pensiones de reparación.
“Nadie de nosotros se está negando a una discusión global y general, hacer un estudio para ver por qué se trató como se trató estas situaciones, el por qué ustedes mismos, partido Socialista, PPD, DC los excluyeron expresamente una y otra vez de estos beneficios que están reclamando, por qué se llamó pensión cuando dicen que en realidad no es pensión. Entonces yo creo que esto da para que nos pongamos de acuerdo, si hay que hay que volver a reparar, yo por lo menos no tengo ningún problema en hacerlo pero me parece injusto el tono que se ha usado a las bancadas del oficialismo”.