RFI: ¿Cómo llega un colombiano a enrolarse como soldado en las llamadas milicias populares de Donetsk?
Alexis Castillo: Yo nací en Colombia, pero antes de llegar aquí, vivía en España. Tuve una militancia comunista en una coordinadora antifascista. Por entonces tuvimos que analizar la situación que se vivía en Ucrania. Observamos que muchos grupos de ultraderecha comenzaban a tomar notoriedad dentro del Euromaidán. Por esa razón comenzamos a saber más sobre la situación que se estaba dando en 2014 en Kiev, pero lo que realmente nos golpeó a todos fueron los acontecimientos que ocurrieron el 2 de mayo de ese año en Odesa cuando un grupo de radicales, que más tarde se convertiría en un batallón con tanques y blindados, quemó a mucha gente dentro de este edificio [sede de los sindicatos]. Este suceso nos movilizó a muchos de los que estábamos en varias organizaciones antifascistas. Nos concentramos, nos manifestamos. Algunos montaron estructuras para enviar ayuda humanitaria y otros nos organizamos para viajar hasta Ucrania y ayudar en todo lo posible, ya fuese en hospitales o incluso ayudando a defenderse con las armas. Eso fue una vez que las repúblicas de Donetsk y Lugansk fueron bombardeadas tras realizar un referéndum de independencia para separase de Ucrania.
RFI: Imaginamos que, como Ud., muchos extranjeros apoyan las fuerzas prorrusas. ¿Se habla mucho español?
Alexis Castillo: Sí, hay algún latino más. Pero no están todos en las estructuras militares. Hay algunos en medios de comunicación o en otro tipo de trabajos como logísticos.
RFI: ¿Es difícil enrolarse en las milicias populares de Donetsk?
Alexis Castillo: En 2014 cuando había una estructura más “miliciana”, era más fácil porque no existía una burocracia ni existían condiciones para entrar. Era mucho más fácil. Pero ahora al existir una burocracia y unos procedimientos más formales que se asemejan a un ejército regular es más complicado. Ahora se exige el dominio del ruso, cosa que en 2014 no era una barrera. Muchos de los que llegamos aprendimos el idioma sobre la marcha. Ese fue un factor importante para que nos quedásemos pocos aquí.
RFI: ¿Echa algo de menos su vida anterior?
Alexis Castillo: Mi familia y mis amigos… Y también poder expresarme mucho mejor, ya que no me desenvuelvo tan bien como en mi lengua materna.
RFI: De ser uno de los conflictos olvidados del planeta, la tensión en el Donbás ocupa ahora todas las portadas de la actualidad mundial… ¿Cómo reciben todas las informaciones y opiniones políticas internacionales que se han generado durante los últimos días? ¿Reflexionan sobre lo que se vierte, es algo que los deja indiferente o bien los enciende más?
Alexis Castillo: Es una pregunta compleja que podría responder en dos aspectos. De un lado se ve bien que se dé visibilidad a este conflicto. Que se debatan las razones del por qué. Del otro lado hay un aspecto más peligroso a causa de todas las mentiras que se están contando como que aquí hay un ejército ruso o que Ucrania y Rusia están en guerra. Se está mezclando todo lo que pueda suceder aquí y se llega a escuchar que incluso Estados Unidos tienen bases en territorio ruso. Es preocupante las mentiras que se están contando y el pánico que se está intentando generar alrededor de toda esta desinformación.
RFI: La pasada semana recabamos testimonios de ciudadanos en Rusia y Ucrania que nos comentaban que la sociedad no había cambiado mucho y le gente seguía con su vida normal. Ud. se encuentra en primera línea, ¿realmente se ha incrementado esa tensión? ¿Cómo viven actualmente este conflicto?
Alexis Castillo: Con respecto a la población de aquí, se está llevando una vida normal. No faltan los alimentos en los supermercados. No existe un pánico como cuando se inicia una catástrofe o un conflicto bélico. Estuve en Rusia recientemente y tampoco existe ese pánico que se cuenta. En la frontera no se nota. No se observa nada raro. No se ven filas de autos kilométricas como al inicio de la guerra. En general no se ve ese pánico que muchos medios están difundiendo. Hay medios que incluso han enviado a sus corresponsales a Ucrania e informan que la gente se está armando, que se esconden en refugios… unas barbaridades que me llegaron a generar risa. Todo es muy absurdo. En Ucrania se están dando cuenta de que agitando estas banderas de guerra están perjudicando a su economía. Se está demostrando que el grivna está cayendo y los oligarcas se preocupan por la situación económica que existe actualmente.
RFI: ¿Cuál es su opinión sobre la presión que está tratando de ejercer la OTAN en la región?
Alexis Castillo: Es la organización a la que más le preocupa todo esto porque si no hay un enemigo al cual combatir esta estructura no tendría sentido. La OTAN está enviando armas, instructores y lo que no conocemos. Ofrecen un apoyo militar que, unido a las opiniones de los medios de información masivos, generan un ambiente de pánico. No coincide con la realidad que se está viviendo aquí en el Donbás.
RFI: ¿El despliegue de tropas extranjeras en la región es considerado por vosotros como una amenaza a la paz y la seguridad?
Alexis Castillo: Que algunos países miembros de la OTAN envíen armas y refuerzos a esta zona no nos gusta. Lo estamos viendo. Lo discutimos y lo hablamos entre los camaradas y no es algo positivo. Pero nosotros estamos preparados para defendernos por si les da por utilizar las armas que han enviado. Nos estamos preparando por si ellos quieren probar su fortalecimiento en el ejército ucraniano. Pero esperemos que no ocurra esto. Esperemos que este conflicto se arregle pacíficamente y que no volvamos a sufrir la gran pérdida de compañeros durante el 2014 y 2015.
RFI: ¿Qué opinión tiene sobre esta encuesta: antes de la guerra del Donbás, sólo el 14% de los ucranianos era favorable a unirse a la Alianza Atlántica, mientras que ahora es el 46%?
Alexis Castillo: Todo esto tiene un sentido ya que los medios en Ucrania están bombardeando a la opinión pública con mentiras como que Rusia está invadiendo el país, con informaciones falsas sobre la República Popular de Donetsk. Se ha creado una opinión pública que está dando sus frutos. Llevamos ocho años de guerra y todo este bombardeo mediático tiene que tener un resultado. Ha sido un proceso comandado por el gobierno ucraniano y los medios occidentales, principalmente de Estados Unidos.
RFI: Desde Kiev se acusa a Moscú de alimentar los movimientos rebeldes donde Ud. se encuentra, algo que desde el Kremlin siempre han negado. ¿Qué hay de cierto o de falso en esto?
Alexis Castillo: Nosotros heredamos muchísimas armas que abandonó la antigua Unión Soviética. Más tarde, durante la guerra. Recuperamos muchos tanques y blindados merced a movimientos militares. Del lado económico no puedo ofrecer mucha información, pero comercialmente seguramente haya un acuerdo con la Federación de Rusia. Lo que sí es cierto es que muchas organizaciones rusas políticas y sociales han enviado ayuda humanitaria al Donbás. Igualmente nosotros producimos muchos productos de consumo. En ese sentido tenemos mucha independencia. Digamos que no hay colaboración militar por parte de Rusia. Lo que sí llegaron de Rusia son muchos voluntarios. Pero eso ocurrió en 2014.
RFI: ¿Las milicias populares de Donetsk cuentan con una estructura potente para desarrollar un conflicto bélico más fuerte en caso de guerra?
Alexis Castillo: A pesar de contar con el armamento recuperado en 2014 y 2015, hemos mejorado el ejército cualitativamente en el sentido de que se han desarrollado disciplinas que puede tener un ejército regular cualquiera. En ese sentido sí que estamos más preparados técnicamente. Somos más profesionales y estamos más preparados que en 2014 para organizar la defensa.
RFI: Imagino que las recientes declaraciones de Putin a favor del reconocimiento de las autoproclamadas Repúblicas de Donetsk y Lugansk fueron muy bien recibidas en vuestro ejército, luego de que Moscú propuso en 2015 aplazar el referendo de autodeterminación. Algún beneficio están sacando de la tensión creada por Rusia y Estados Unidos.
Alexis Castillo: Sinceramente no sé si Putin está de acuerdo o no en reconocernos. Lo que sí es conocido es que el Partido Comunista de la Federación de Rusia quería proponer esto a la Duma, pero por ahora no se ha dado oficialmente. Sobre todo, si nos dan la oportunidad de decidir mediante algún mecanismo, como puede ser un referéndum, de adherirnos a la Federación de Rusia, la gente de aquí saludaría ese acontecimiento con alegría, como ocurrió en Abjasia o Osetia del Norte, que tras unirse a la Federación acabaron con el final de sus respectivas guerras.
RFI: ¿Cómo piensa Alexis Castillo que será el desenlace de todo este conflicto?
Alexis Castillo: Para mí habría dos caminos. El largo sería que el gobierno de Ucrania cambiase y se juzgasen todos los crímenes de guerra hacia la población civil. Que se eliminasen los batallones nacionalistas. Que se purgasen las estructuras del Estado, concretamente en estamentos como el Ejército, la Policía y los citados batallones. Y que la gente de aquí tuviese el ánimo de reconciliación. Ese es el camino largo, algo que no se puede dar inmediatamente. El camino corto, y quizás el que se acerca más al sentido común y la realidad de lo que está pasando, sería que Rusia nos reconociese como Estados independientes. Que se realizase un referéndum y pudiésemos tener una vida más normalizada dentro de la Federación de Rusia. Tal vez esta segunda opción es más realista porque en la primera opción dudo mucho que Ucrania haga el esfuerzo de realizar todos esos procesos. Además, sería muy difícil que la gente olvide todos los acontecimientos ocurridos en Ucrania y este territorio. Ojalá se solucione toda esta escalada de forma pacífica, ya que ningún padre ni ninguna madre quieren que sus hijos sufran por todo lo que causa una guerra.
(Imagen: RFI – © DR)