Hasta hace algunos días, la ingeniera Tamara Agnic formaba parte del directorio de la concesionaria de la Universidad de Chile Azul Azul. En esa condición votó en contra de la incorporación de la ex ministra de Sebastián Piñera, Cecilia Pérez, para que se integrara a los controladores del club. Los mandantes de Agnic decidieron pedirle que rectificara su voto y ella, en un acto bien calculado, dijo que no cambiaría su parecer y que prefería renunciar a su sillón en el club laico. Pocas horas después su nombre era dado a conocer como uno de los nuevos miembros del directorio de BancoEstado.

Tamara Agnic es recordada por su rol como superintendenta de Pensiones durante la segunda administración de la presidenta Michelle Bachelet cuando se cuestionó su rol en la fusión de AFP Cuprum y Argentum.

En ese momento, el entonces diputado Fuad Chahín (hoy miembro de la Convención Constituyente), presentó un reclamo ante la Contraloría General que finalmente no prosperó.

El punto que reclamaban entonces, esto es en el año 2015, era que Argentum surgió como un ente ficticio sólo para concretar la fusión con Cuprum, generando beneficios fiscales por 80 mil millones de pesos en un plazo de 10 años por el no pago de impuestos a favor del grupo principal.

Los cuestionamientos fueron rechazados en esta oportunidad por el ministro de Hacienda, Mario Marcel, quien señaló que los hechos fueron despejados en su oportunidad y no le impidieron ejercer diferentes funciones.

“Eso tiene que ver con una discusión que ocurrió hace aproximadamente diez años. Esa discusión fue resuelta en aquel momento, así que no hay mucho que agregar. Tamara Agnic es una profesional muy destacada. Después de los cargos públicos ha tenido un rol muy importante. Trabajó en una firma de auditorías, ha escrito continuamente sobre materias de transparencia y probidad en la empresa privada, en el sector público. Creo que ese currículum habla por sí solo”, comentó el titular de Hacienda.

Pero la designación fue criticada por el vocero del movimiento No + AFP, Luis Mesina, quien indicó que se trata de una situación grave ya que como superintendenta de Pensiones generó un problema serio al país.

“No hay que perder de vista que ella siendo superintendenta de Pensiones, generó un problema bastante grave a nuestro país cuando autorizó las fusiones que fueron denominadas truchas entre Argentum y Cumprum, Adquisition y Provida, que le significó una pérdida al erario nacional de más de 420 millones de dólares y cuya decisión de la superintendenta fue cuestionada fuertemente por la ministra del Trabajo de la época, Ximena Ricón que le ordenó detener esa operación”, recordó Mesina.

El dirigente agregó que Agnic “se rebeló ante esa decisión de la ministra del Trabajo. La Contraloría ordenó y señaló que ese era un procedimiento irregular. La Cámara de Diputados generó una comisión investigadora, el entonces diputado Fuad Chahín, hoy día convencional. Y la opinión pública tuvo un juicio bastante crítico respecto a esa decisión. Ella contó sólo con el apoyo de las AFP y del ministro Rodrigo Valdés, que han sido fervientes partidarios del sistema de capitalización individual”.

Mesina consideró que “esta designación que no cabe ninguna duda, tiene un peso significativo en la persona de Mario Marcel, que parece que está siendo hegemónico en todas las decisiones de carácter político y económico del actual Gobierno, es un desacierto que puede socavar la legitimidad del Gobierno frente a la opinión pública. Por eso es tan grave”.