Es en medio de las altas temperaturas que afectan a la zona central del país, que la mañana de este viernes la Región Metropolitana amaneció sumida en una densa capa de humo producto de incendios forestales, razón por la que la Delegación Presidencial junto a diversas autoridades regionales decidieron decretar alerta por riesgo sanitario y llamaron a la gente a no exponerse innecesariamente a estos gases.
Pero ¿Cuáles son los alcances de esta medida? La directora de Enfermería de la Universidad Central, Ana Luisa Fierro, explicó que esta decisión está relacionada con los potenciales efectos que este evento podría tener en la salud, principalmente en el aparato respiratorio. “Sabemos que la inhalación de humo puede ser altamente peligrosa para la población en general, pero en especial para las edades extremas del curso de vida, estamos hablando de niños, personas mayores y aquellos que tengan alguna patología de base”, señaló.
En esa línea, detalló que “nos podemos encontrar hoy día con muchas personas que pueden estar teniendo sintomatología como tos, carraspeo en la garganta, irritación en los ojos, moqueo”, por lo que destacó la necesidad de estar evaluando estas señales y a la evolución que puedan tener, de manera de evitar cuadros más graves y tener que recurrir a un servicio de urgencia.
Entre esas complicaciones apuntó a la aparición de náuseas, vómitos y dificultad respiratoria. Sobre esto último dijo que “nos daríamos cuenta de que su frecuencia respiratoria sería más intensa, más rápida, la persona podría referir que se siente más cansada; podríamos ver también alguna situación a nivel neurológico, algún tipo de confusión mental y eso estaría dando cuenta de que el cuadro se estaría complicando”.
De modo que resaltó la importancia de que tanto la familia como el entorno cercano esté atenta a esta sintomatología para hacer un traslado y una evaluación médica oportuna.
Asimismo, destacó la importancia de estar pendiente a las instrucciones de las autoridades sanitarias, recalcando, por ejemplo, la necesidad de usar la mascarilla, evitar hacer ejercicio en espacios abiertos y cerrados y reducir en lo posible el uso del transporte público.
En cuanto a los primeros auxilios en caso de complicaciones en casa o en el lugar de trabajo, la académica detalló que “si estamos hablando de la sintomatología leve, esta debiera ceder al ser retirada la persona de la exposición, es decir, al estar en un lugar libre de humo; pero si estamos ante presencia de náuseas, vómitos, cefalea intensa, las medidas que uno puede tomar puede ser desde el punto de vista de la hidratación, pero si nos damos cuenta de que esto sigue avanzando y persiste en el tiempo es necesaria una evaluación médica”.
“Si es que aparece dificultad respiratoria y la persona respira como si estuviera cansada como si hubiese corrido y no lo ha hecho, no va a bastar con las medidas que tomemos en casa, sino que vamos a requerir trasladar a un servicio de urgencia porque probablemente esta persona va a requerir un apoyo que en el domicilio o la oficina no vamos a poder brindar”, puntualizó Fierro.