Luego de la final perdida ante Argentina, dos futbolistas franceses concentraron la odiosidad de los fanáticos galos en redes sociales.
Se trata de Kingsley Coman y Aurelien Tchouameni, quienes erraron sus penales en la serie de ante los trasandinos, lo cual conllevó lamentables comentarios de los cibernautas.
La mayoría de los insultos fueron de carácter racista, apuntando al origen “africano” de los jugadores, lo cual que fue denunciada por varios de sus seguidores.
Ante esta situación, el club alemán Bayern Múnich, elenco en el cual milita Coman, decidió pronunciarse a través de su cuenta de Twitter y criticó duramente lo ocurrido con el atacante.
“FC Bayern condena enérgicamente los ataques racistas contra Kingsley Coman. La familia del Bayern está a tu lado, querido Kingsley: el racismo no tiene cabida en el deporte ni en nuestra sociedad”, indicaron desde la escuadra bávara.
Lo sucedido con los deportistas de Les Bleus trajó a la memoria el mal rato que debieron pasar a mediados de 2021 los ingleses Bukayo Saka, Marcus Rashford y Jadon Sancho, quienes también erraron sus tiros desde el punto penal en la final de la Eurocopa ante Italia y recibieron una serie de comentarios racistas.