En el marco de la ceremonia de navidad palestina, el Presidente Gabriel Boric dio a conocer la determinación del Ejecutivo de elevar la representación diplomática de la oficina de Chile en Ramallah a la categoría de embajada. Una medida que radica en la continuidad de la política exterior del país, complementó esta mañana la ministra de Relaciones Exteriores, Antonia Urrejola, aludiendo al reconocimiento que Chile hace tanto del Estado Palestino como del Estado de Israel y la promoción de una cohexistencia pacífica entre las partes.
Un anuncio que no dejó indiferentes a figuras del Congreso. Quien valoró la medida y enalteció el gesto del Presidente fue el senador y vicepresidente del Grupo Interparlamentario Chile-Palestina en la Cámara Alta, Sergio Gahona (UDI). “Ya hace más de diez años que el Estado de Chile reconoció al Estado de Palestina en un acto de nobleza y justicia que hizo el propio Presidente Piñera, por tanto eso ya existe. Lo que ha hecho el Gobierno del Presidente Boric subir la categoría de nuestra representación consular a embajada y es correcto para poder equiparar la situación de dos Estados con el caso de Israel”, sostuvo.
Y aseguró que “esto en nada afecta la situación que pueda haber con las relaciones con Israel. Me parece que lo que hace el Presidente es igualar las condiciones y es colocar al Estado de Palestina como corresponde en una relación a nivel de embajadores”.
“Me parece muy correcto y felicito al Presidente Boric por esa medida”, añadió.
Otra opinión es la que tuvo la diputada de Renovación Nacional e integrante de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara, Ximena Ossandón. “La primera misión en materia internacional de parte de nuestro Gobierno es resguardar los propios intereses de nuestro Estado y la pregunta que se me viene a la cabeza es qué gana el Estado chileno abriendo embajada en Palestina“, cuestionó.
“Desde hace muchos años que Chile reconoce al Estado de Palestina y dos grandes comunidades, la Palestina y la Judía, conviven de forma razonable y armónica en nuestro país. El querer abrir una embajada me parece que es una señal que el Presidente quiere dar y tal vez quiere introducirse o meterse en medio de un conflicto entre dos Estados con una aspiración, para mi gusto, carente de mucha reflexión, de ser el puente o mediador para que estas naciones resuelvan su conflicto”, sostuvo.
Por tanto, consideró que “lo mejor seria tener embajador concurrente como tienen varias otra naciones y no desdibujar el rol del Estado chileno”.
Maurice Khamis: “Este es un gesto que de verdad contribuye a la paz”
En conversación con Radio y Diario Universidad de Chile, el presidente de la Comunidad Palestina en Chile, Maurice Khamis, destacó el gesto del mandatario. “Señaló el mismo Presiente que ya basta de palabras de buena crianza y estamos de acuerdo que ya el pueblo palestino no necesita afecto sino que necesita efecto”, indicó.
En vistas de que Chile ya contaba con una oficina de representación ante Palestina, la que cuenta con un embajador desde el año 1998, Khamis indicó que “esto no debería causar ninguna sorpresa ni ningún problema de ningún tipo, además del punto de vista económico, que algunos dicen que por qué Chile gasta tanta plata en embajada. Bueno, esto no es ningún gasto adicional, es el mismo gasto, ya existe la oficina en Ramallah que es la capital política palestina, existe la casa del embajador en Jerusalén, es su residencia, por lo tanto mayores gastos no va a tener”.
Por lo demás, se manifestó en desacuerdo con la consideración de la diputada Ossandón. “Chile tiene un embajador no concurrente en Israel ¿Por qué tratar a Palestina de forma diferente? Que es el país oprimido”.
En ello, aseveró que “lo más importante es que este es un gesto que de verdad contribuye a la paz porque ya es una medida concreta, no son solamente condenas, es una medida concreta que presiona a Israel a adecuarse al derecho internacional que obviamente lo viola flagrantemente e Israel está absolutamente de matar niños, niñas, periodistas”.
La incomodidad de la comunidad Chilena de Israel
Preocupación generó en la Comunidad Chilena de Israel el tono que utilizó el mandatario para referirse a las visicitudes que atraviesa el pueblo palestino. Mediante un comunicado, destacaron que “el Presidente se refirió, como en reiteradas ocaciones, al pueblo palestino como una comunidad que ‘está resistiendo’, que ‘sufre violaciones a los derechos humanos’ y una ‘ocupación ilegal'”.
Apuntando a ello, dijeron ver “con preocupación que nuevamente la narrativa de los mensajes con respecto al conflicto palestino-israelí, en lugar de incentivar a la paz y promover una solución de dos Estados, se centra en excerbar el problema, refiriéndose a la ‘resistencia palestina’ que en la práctica, se traduce en justificación de atentados terroristas y lanzamiento de misiles a civiles israelíes, además de apoyar a un Gobierno dictatorial tanto en la Franja de Gaza, liderada por el movimiento terrorista Hamas, como en la Autoridad Nacional Palestina por parte del Gobierno de Mahmoud Abbas”.
Por tanto, indicaron que “creemos necesario recordarle al Presidente sobre los avances que se han alcanzado desde los Acuerdos de Abraham (2020), la Cumbre de Neguev (2022) y la normalización de relaciones que ha conseguido Israel con diversos países del Golfo, demostrando que, si es que hay reconocimiento y legitimación mutua, Israel puede trabar en conjunto con sus vecinos en pos de la paz y estabilidad de la zona”.
Si bien afirmaron que “el Gobierno de Chile es libre de invertir recursos donde estime conveniente”, repararon que “los anuncios de esta índole no deben ser entregados con un mensaje que derive en odio, división y justificación del terrorismo que amenaza también a más de 10.000 chilenos que vivimos en Israel”.