En el marco de la reactivación de los incendios forestales en la Región del Bíobío y La Araucanía el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, encabezó un nuevo Comité para la Gestión de Riesgo y Desastres (COGRID) en el que aseguró que la emergencia está contenida pero no ha terminado. Al momento hay 260 incendios activos en el país, de los cuales 77 están en combate.

Desde las dependencias del Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres en Santiago, el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, declaró que toda la atención de las distintas instituciones públicas y privadas estaría dedicada a la situación de los incendios forestales, dado que desde la fecha hasta el 23 de febrero, las condiciones climáticas del país que favorecen la propagación del fuego empeorarán.

“Vamos a mantener altas temperaturas, baja humedad y lamentablemente vamos a mantener vientos, lo cual mantiene una situación de riesgo en la zona centro-sur de Chile, desde Valparaíso hasta la Región de la Araucanía”, detalló.

En esa misma línea, la autoridad señaló que ante tales características climáticas lo más importante en este contexto es no generar incendios. “Quiero volver a reiterar el llamado a las personas a evitar conductas de riesgo que terminen en incendios. Quiero recordar que el incendio en La Araucanía en Teodoro Schmidt se generó a partir de una actividad productiva”, dijo.

El subsecretario informó que en el territorio nacional hay 260 incendios activos, de los cuales 77 están en combate y 439 mil hectáreas han sido consumidas por el fuego. De acuerdo a Monsalve, en cuanto a los incendios más relevantes en la Región del Maule se encuentra en combate el de la comuna de Longaví, en Ñuble se han desactivado los siniestros con alerta roja, pero en Quillón se mantienen lo de Santa Gertrudis, Ninhue y Casa Blanca. En la Región del Biobío se mantienen activos los incendios de El Cortijo y Santa Ana, mientras que en La Araucanía se mantiene en combate el incendio El Molino.

“Hay que recordar que para los incendios, como el de Santa Ana que tiene 55 mil hectáreas consumidas y que su proyección puede amenazar sectores poblados, hay objetivos tácticos para evitar que esas amenazas se concreten”, afirmó. Asimismo, la autoridad de Interior explicó que los objetivos tácticos se trabajan todos los días por parte de los equipos de Conaf y del sector privado.

Monsalve destacó que ha habido un 5% menos de incendios que la temporada pasada, pero lo complejo de los siniestros de este año no tiene que ver con la cantidad sino con su comportamiento extremo, debido a que la baja humedad, la cantidad de combustibles, las altas temperaturas y el viento han significado incendios de altísima complejidad.