Los dos gobiernos decidieron reconocerse mutuamente y establecer relaciones diplomáticas a nivel de embajador con efecto inmediato, anunció el ministerio chino de Relaciones Exteriores en un comunicado.
“Hoy damos un paso histórico en ese proceso de afianzar y fortalecer nuestras relaciones internacionales, particularmente con el pueblo y gobierno chino”, declaró el ministro hondureño de Relaciones Exteriores, Enrique Reina, tras firmar una declaración conjunta con su par Qin Gang. Honduras reconoce “efectivamente que existe una sola China en el mundo y que el gobierno de la República Popular de China es el único gobierno legítimo que representa a toda China”, agregó.
El anuncio se hizo horas después de que Tegucigalpa anunciara el rompimiento de relaciones con Taiwán. Reina, siguiendo instrucciones de la Presidenta de la República, Xiomara Castro, comunicó a Taiwán la decisión de la ruptura de relaciones diplomáticas entre ambos, indicó el Ministerio de Relaciones Exteriores de Honduras.
El anuncio tuvo lugar dos días después del viaje de Reina a Pekín para discutir el establecimiento de lazos diplomáticos bilaterales, impulsado por Xiomara Castro bajo el argumento de necesidades económicas. En ese sentido, el ministerio de Relaciones Exteriores de Taiwán acusó a Pekín de “atraer a Honduras con incentivos financieros”.
Reina había justificado la semana pasada el giro diplomático en la falta de respuesta de Taipéi a los pedidos de cambiar el tenor de una relación basada mayormente en “donaciones y proyectos” por 50 millones de dólares anuales. El ministro de la Presidencia de Honduras, Rodolfo Pastor, reiteró este viernes que el interés económico impulsó a Tegucigalpa a buscar relaciones con Pekín.
Pastor reconoció que “Taiwán ha sido un aliado importante en nuestro país y estamos profundamente agradecidos”, pero “también tenemos en este momento que reconocer una realidad global, un escenario mundial que marca el ascenso de China como una potencia económica, comercial y política”.
América Latina ha sido escenario crucial de las disputas entre Pekín y Taipéi desde que se separaron en 1949 tras el triunfo de las fuerzas comunistas en la guerra civil china. Costa Rica (en 2007), Panamá (2017), El Salvador (2018) y Nicaragua (2021) rompieron con Taiwán y se vincularon a Pekín, que lleva muchos años buscando que los aliados diplomáticos de Taipéi cambien de bando.
Tras la decisión de Honduras, sólo 13 países del mundo reconocen a Taiwán, entre ellos Paraguay, Haití y otras siete pequeñas naciones isleñas del Caribe y el Pacífico.
En un esfuerzo por consolidar este pequeño grupo de aliados, que se reduce, Taiwán anunció el martes pasado una visita de la presidenta Tsai Ing-wen a Guatemala y Belice la semana próxima.