Para responder las dudas que ha generado el proyecto “Gas de Chile” de la Empresa Nacional del Petróleo, ENAP, la comisión de Minería del Senado citó al ministro de Energía Diego Pardow, y a la presidenta del Directorio y Gerente General de la compañía, Gloria Maldonado, quienes expusieron los beneficios de la iniciativa, el impacto en el mercado y el interés que despertó en las Pymes que están suscribiendo convenios para su distribución, como también las diferencias con el plan piloto.

“Como gobierno corporativo en ningún caso hemos puesto en riesgo el patrimonio de nuestra empresa”, enfatizó Maldonado.

En su exposición, señaló que ENAP produce GLP en sus refinerías el cual necesita colocar en el mercado nacional. Adicionalmente, ENAP posee plantas de envasado ubicadas en San Fernando y Linares, dónde se envasan más de 120 mil cilindros al mes, las que tienen una capacidad máxima de 540 mil cilindros por mes.

Señaló  que a la fecha, al actual proyecto comercial se han incorporado siete clientes minoristas a “Gas de Chile”. Entre estos, tres ya tienen sus propios cilindros y se han transformado en minoristas multimarca y los cuatro restantes, son nuevos operadores minoristas.

Se trata de Llanuras del Sur, de Talca; Gasparín, de San Fernando; Comunigas, de Curicó y HN de Linares, las que suman a las tres que ya se encuentran operando: Suma Gas, Gasnet y Glen Energy.

Además, explicó que el nuevo modelo no exige exclusividad, ofrece precios competitivos sin subsidios, ni distorsiones, ni asimetrías entre nuevos clientes, “cumpliendo así nuestra política comercial, transparente y no arbitraria, favoreciendo el desarrollo nuevos entrantes, en línea con las recomendaciones de la Fiscalía Nacional Económica, FNE”.

Respecto del piloto no comercial, la gerenta de la empresa afirmó que éste “fue aprobado por el directorio corporativo de la empresa ENAP porque fue evaluado y costeado y luego aprobado su costo y valor por ambos mandantes que son los misterios de Hacienda y Energía”.

Por lo tanto, agregó, “se mantuvo una evaluación periódica de este proyecto a solicitud del gobierno corporativo, se creó una mesa de trabajo con el ministerio durante los cinco meses que duró el proyecto piloto y eso nos permitió entender dónde estaban las fortalezas y dónde estaban las debilidades”.

Sobre la consulta de cómo se compraron los balones de gas, Maldonado explicó que esto se hizo siguiendo todos los procedimientos internos de aprovisionamiento y se compraron a proveedores nacionales.

Frente a las confusiones que genera con el proyecto piloto, aclaró que éste no se amplió a 100 mil cilindros, sino que la iniciativa beneficiaba a 100 mil familias, “pero nosotros como gobierno corporativo sólo probamos un proyecto acotado a 6 mil cilindros. También se plantea una duda sobre los cilindros de gas que efectivamente tienen una vida útil de 50 años, requieren una mantención cada 10 años y por lo tanto, los costos de inversión de los cilindros adquiridos para este programa piloto van a durar 50 años”.

Respecto del sustento económico del proyecto actual, informó que se puso a disposición de grandes distribuidores, como también de empresas pequeñas. En el caso de la planta de Linares, el cilindro tiene un valor de 10 mil y 11 mil pesos con IVA, valor al que puede acceder cualquier empresa que pueda distribuir y quiera comprar el gas licuado de ENAP. Además, esto ha impactado positivamente en el mercado, ya que las grandes marcas ofrecen el gas por aproximadamente 23 mil pesos el cilindro.

Por su parte, el ministro de Energía, Diego Pardow, afirmó que lo que hace ENAP en su formato de negocio actual es que “cumple íntegramente con los principios de neutralidad competitiva y autofinancimiento que le son aplicables a la compañía”.

Indicó que siguiendo a las recomendaciones de la FNE, la idea es “desintegrar y desde esa perspectiva la idea matriz de perseguir la desintegración, tanto a nivel de propiedad como de contrato, lo que busca precisamente es incentivar la competitividad”.

En tanto, el senador Gastón Saavedra recordó que toda esta discusión y el proyecto surgido desde ENAP viene desde la “colusión de las empresas y porque se esquilmó al 40 por ciento más pobre de los chilenos con el precio con el que se pusieron de acuerdo tres empresas”.

Por eso, indicó que se buscó esta salida tal como lo propuso la FNE. “Había que entrar al mercado del gas para el consumo humano, nuevos actores y se recurrió a ENAP que tiene el gas. Porque en la elaboración del combustible uno de los subproductos es el gas líquido de petróleo y por eso es barato, no se tiene que importar, está allí”, precisó.

Saavedra puntualizó que “la función de las empresas del Estado es el bien común y para ello, hay que hacer una inversión inicial y eso fue lo que hizo ENAP con los cilindros, porque en canasta no se puede vender el gas”.