El pasado viernes 29 de septiembre, el Gobierno pidió a la Corte Suprema un nuevo plazo para aplicar el fallo en contra de las isapres, atendiendo a una solicitud de la Comisión de Salud del Senado, que aún se encuentra estudiando la ley corta sobre la materia.
Para comentar esta decisión, Radio y Diario Universidad de Chile conversó con el senador y presidente de la Comisión de Salud, Juan Luis Castro, quien indicó que esta semana el Comité de Expertos, conformado para estudiar la ley corta de isapres, entregará su informe final.
“Mañana se inicia la votación del proyecto en general y durante el mes de octubre va a ser despachado a la sala del Senado para que este, a su vez, lo refrende y vaya al segundo trámite a la Cámara de Diputados. Lo más probable es que el proyecto de ley tenga un desfase, pero posiblemente esté resuelto en todos sus trámites en marzo, antes de que venza el plazo de la Corte Suprema, que es en mayo”, detalló.
Respecto a las características del fallo, Castro explicó que “es muy contundente y esencialmente pide devoluciones a las personas. También establece que los menores de dos años no se les debe cobrar y por otro lado, hay un segundo fallo de agosto, que tiene que ver con la rebaja del precio, porque también se cobró demás la prima del auge”.
En ese contexto, el senador recordó que el objetivo de la ley corta sobre isapres es asegurar “el cumplimiento de los fallos, que haya viabilidad financiera para que se paguen las devoluciones y que ojalá ninguna persona de las dos millones 800 mil que están en las isapres, más los cinco millones de personas Fonasa, que se atienden en el sistema de clínicas privadas, sufran deterioro o detención de su atención”.
De todas maneras, Castro advirtió que “hay una mezcla de distintos factores que tienen que ser resueltos, en la ley corta algunos de ellos y otros en un proceso de reforma a la salud que queremos iniciar a contar de este mes, con un comité especial de personalidades de la salud pública chilena”.
A juicio del senador del Partido Socialista, es necesario avanzar hacia un reforma del sistema que contemple, entre otras cosas, el establecimiento de un seguro único, la atención primaria universal y también un cambio en el sistema de trabajo de los médicos.
“La lógica de isapres se agotó en el país. El país ya no acepta ni resiste una situación de letra chica, de 40 mil planes de salud y mil tablas de factores. Era un dispositivo hecho para que nadie lo entendiera y para que la gente pagara por el punto y la coma de todo lo que estaba cancelando el plan de salud, pero eso ya no resiste más”.
“De hecho, Chile es el último país de la OCDE que tiene una seguridad social basada en un impuesto, que es el 7% de la salud y que tiene sobre ese impuesto seguros privados que mantienen la lógica de la discriminación por sexo y edad. Realmente, es una situación bien inédita”, dijo.
Por último, consultado respecto a la voluntad de la oposición para tramitar una reforma a la salud, Castro señaló que “el diálogo político en el Senado tiene bastante más grados de consenso que lo que la gente imagina”.
“Curiosamente, a diferencia de las pensiones y la reforma tributaria, aquí hay sectores muy amplios, de pensamientos más liberales hasta pensamientos más progresistas, que estamos coincidiendo en que debemos ir hacia un fondo universal de salud. Con la Universidad Católica, por ejemplo, ya coincidimos en que la atención primaria universal debe ser un camino a seguir, en que la capacidad laboral tiene que ser abordada con urgencia y claro, habrá que ver otros aspectos, no en todos hay coincidencias, pero yo creo que hay una base bastante razonable. Piso técnico para una reforma política de salud hay más que otras veces”, concluyó.