Nicolás Burgos no parece conocer el cansancio. El tenismesista lleva seis partidos en los Juegos Panamericanos, en dobles varones, dobles mixto e individuales, ya ganó una medalla de bronce y hoy puede cosechar otras dos para Chile. Una presentación sobresaliente para el jugador de 21 años en Santiago 2023.
Pero no se detiene. Después de superar al favorito brasileño Vitor Ishiy en singles esta mañana en el Centro de Entrenamiento, el joven radicado en Alemania se mostró satisfecho más allá del trajín de la competencia. “Me sentí súper cómodo. En la mañana venía incómodo, ayer y anteayer jugué muchos partidos, tenía un par de dolores, pero en el partido me la jugué el todo por el todo, cada golpe y cada táctica que usé me resultó”, valoró.
En ese sentido, haber derrotado a un jugador de la jerarquía del brasileño es un aliciente para el chileno. “Para mí es muy exigente, yo he jugado todas las pruebas completas, estoy cansado pero hay que seguir. Ante un rival así, jugadores de esa calidad, que entrenan en los mejores centros, con los mejores jugadores hay que arriesgar todo”, subrayó.
“Tuve los huevos de arriesgar, es mi juego y me resultó”, completó Burgos, que a las 17:30 horas se medirá con el canadiense Eugene Wang por el boleto a semifinales de singles, pero antes tendrá la posibilidad de avanzar a la final de dobles junto a Gustavo Gómez, contra los brasileños Hugo Calderano y el mismo Ishiy.