Guatemala vivió este domingo una tensa jornada de cambio de mando que llevó al presidente electo, Bernardo Arévalo, a tomar posesión horas después del programa original.
El retraso respondió a una disputa en el Congreso Nacional guatemalteco que debía revisar las credenciales de los diputados electos y reelectos, para elegir a la nueva mesa directiva del Pleno que daría pie a la ceremonia de juramentación de Arévalo.
La polémica se enmarcó tras un fallo emitido por la Corte de Constitucionalidad de Guatemala que dictaminó la suspensión temporal del Movimiento Semilla, partido político de Arévalo, en razón de una orden judicial producto de una investigación de irregularidades en su conformación.
Esto, echaba por tierra las intenciones de la colectividad para presidir el Congreso, puesto que sin ser una bancada no se puede acceder a la presidencia. Lo que abrió toda una jornada de incertidumbre, pues el gobierno entrante necesitaba liderar a lo menos la mesa directiva frente a un Congreso con mayoría opositora.
Sin embargo y producto de un acuerdo que revocó la suspensión del Movimiento Semilla, finalmente el presidente electo de la Cámara fue Samuel Pérez, miembro del Movimiento Semilla y quién lideró la investidura presidencial dado que el mantario saliente, Alejandro Giammathei, señaló por redes sociales que “ante el riesgo de llegar a medianoche sin iniciar los actos protocolarios, en este momento hice entrega de los símbolos de la Presidencia al Congreso de Guatemala”.
La medida correctiva fue impulsada por la diputada Andrea Villagrán, quién presentó una solicitud para modificar el párrafo que decretaba a los diputados del bloque Semilla como independientes. El recurso fue aprobado por 93 votos a favor y 66 en contra.
Por dicha razón y tras horas de espera, Peréz entregó los símbolos de presidencia al socialdemócrata, Bernardo Arévalo. En su discurso, el nuevo mantario apuntó a un discurso anti-corrupción y afirmó que “nunca más el autoritarismo. Jamás permitiremos que la violencia sea empleada como medio para promover agendas políticas o preservar privilegios”.
Cabe destacar que el Presidente Gabriel Boric viajó este domingo a Guatemala para participar de la transmisión de mando, sin embargo, su agenda en Chile no le permitió mantenerse en el país.
Por medio de su cuenta de X, afirmó que “he de partir de vuelta a Chile en el horario programado porque tenemos compromisos a primera hora del lunes. Pero me voy con la tranquilidad que Guatemala y Bernardo Arévalo saben que tienen en Chile y en nuestro gobierno un aliado para la construcción democrática de una sociedad más justa”.
Acabo de conversar con el Presidente Arévalo @BArevalodeLeon. Está tranquilo, seguro de que más allá de los últimos intentos burdos de algunos sectores para impedir que tome posesión del cargo, asumirá como Presidente de Guatemala en plenitud de funciones durante esta jornada. pic.twitter.com/CzWMmeXOma
— Gabriel Boric Font (@GabrielBoric) January 15, 2024
También por problemas de agenda se marcharon del país, el presidente de Paraguay, Santiago Peña, y de Costa Rica, Rodrigo Chaves, junto al rey de España, Felipe VI.