La investigadora y presidenta de la Fundación Nodo XXI, cercana al Frente Amplio, Camila Miranda, abordó el escenario en el progresismo de cara a las elecciones presidenciales del 2025, donde todas las encuestas muestran que la expresidenta Michelle Bachelet se instala como la carta más competitiva del sector.
En conversación con la primera edición de Radioanálisis, Miranda sostuvo que si bien puede ser pronto para sacar conclusiones a partir de los sondeos, “lo que creo no es apresurado, es reconocer que es una figura del sector que tiene posibilidades presidenciales. No solamente por el escenario en el que estamos, sino que porque ha sido presidenta antes”.
Abordando las dificultades del Frente Amplio para producir su propia figura presidencial, la investigadora indicó que uno de los grandes dilemas es que, en esta conversación, “su carta más instalada es actualmente el Presidente de la República y eso genera una dificultad en dos sentidos: la primera, de estar instalando otras figuras estando el Presidente en ejercicio y, la segunda, es que efectivamente no puede ir a reelección en este ciclo y eso genera un dilema respecto de qué elementos durante este gobierno ha podido o no instalar y que uno podría plantear que requieren continuidad”.
Sin embargo, precisó que “tampoco soy tan fatalista con que no tenga figura, si uno ve el escenario en el cual emerge Gabriel Boric como carta presidencial además de, a mi parecer, del acumulado de dos décadas de lucha y activación social que nos llevan a ser la carta fuerte frente a José Antonio Kast”.
Esto último, porque afirmó que “las perspectivas de Gabriel Boric antes de ir a esa primaria no eran ser Presidente de la República en ese contexto, sino que otro tipo de expectativas como ser senador o tener otro desenlace en términos de una carrera política, habiendo sido diputado, y eso fue rápidamente constituyéndose, así que no creo que no pueda constituirse una figura emergente desde el sector“.
Respecto a la figura de la expresidenta Michelle Bachelet, Miranda indicó que “uno de los grandes valores que tiene para la alianza hoy día amplia, que incluye en algunos momentos, sobre todo en el pacto electoral, a la Democracia Cristiana, es que puede generar ese diálogo amplio, no con menos tensiones. Si uno ve Bachelet 1 y Bachelet 2 también experimentó importantes tensiones en el último momento sobre todo con ciertas expresiones de la DC que probablemente hoy día no están en la DC, pero también con su propio partido político”.
“Es una figura que genera transversalidad porque quiebra ciertos principios de la política concertacionista si uno lo revisita desde este momento. La primera es haber intentando en materias de los derechos de las mujeres hacer un avance sustantivo porque a mi parecer reencuentra en un diálogo, ahora diferente siendo gobierno, al Frente Amplio con la experiencia o la iniciativa que tuvo la presidencia en esa materia”, detalló.
Bajo ese análisis, Miranda también mencionó las diferencias del Frente Amplio con la política de la gratuidad en la educación que implementó Michelle Bachelet. “Si bien nosotros fuimos sustantivamente críticos, en ciertas dimensiones esa crítica se confirma si uno considera que hoy día la gratuidad incluso financia a instituciones de baja calidad que era un problema que nosotros también poníamos sobre la mesa en ese momento, pero -sin duda- para las generaciones ha sido un alivio y una forma de experimentar, a mi parecer con una orientación diferente, la idea de tener derecho a educarse sin endeudarse”, explicó.
“Entonces, creo que hay un par de dimensiones que permiten un diálogo diferente visitado desde este momento, yo creo que no se puede desconocer las diferencias que se tenían y muchas estaban vinculadas con las prioridades o la forma en que se llevaron adelante las reformas educacionales que fueron hartas durante su mandato, pero también reconocer que fue la única Mandataria que inició un proceso de tratar de cambiar o alterar ciertos elementos que en la educación veníamos heredando de la dictadura. Creo que esa doble dimensión de análisis hace que para el Frente Amplio hoy día no sea necesariamente una oposición radical a que ella sea una figura transversal del sector“, zanjó.