Este domingo 24 de noviembre se llevará a cabo la segunda vuelta correspondiente a las gobernaciones de 11 regiones del país. Según recalcó el Servicio Electoral, será una jornada de carácter obligatorio, para la cual están considerados 4.116.702 electores, 2896 locales de votación y 22 candidatos.
No obstante, las principales dudas respecto del funcionamiento de estas elecciones tienen que ver con los reclamos de vocales de mesa que, en la jornada del 26 y 27 de octubre, acusaron exceso de trabajo que, posteriormente, no fue recompensado.
Esta vez, según indicó el presidente del Servel, Andrés Tagle, participarán 182.440 personas como vocales de mesa, cuyo pago anteriormente pactado por ley será de 166 UF.
Asimismo, adelantó la autoridad, “por estos días se ha anunciado el pago anticipado de los bonos de los vocales que sirvieron en octubre. Esto nos alegra mucho, ya que reconocemos que su trabajo, pese a lo extenuante y largo, fue realizado con compromiso y calidad”.
Respecto de los reclamos correspondientes a las últimas elecciones, Tagle deslindó la responsabilidad del Servel y explicó que las demoras en el escrutinio tuvieron relación con que “se juntaron cuatro elecciones y votaron más de 13 millones en cada una de ellas. El total de votos que hubo que escrutar en Chile fue de 52 millones de votos”, mas no con “una indicación diferente” de parte del órgano electoral.
Y sobre las posibilidades que tiene la institución para enfrentar este tipo de problemas en futuras elecciones, Tagle apeló a pensar en el uso de la tecnología como mecanismo de escrutinio.
“Creo que el país tiene que pensar en formas con más tecnología para hacer el escrutinio, eso no va a ser inmediato, se va a demorar sus años, pero tenemos que avanzar a incorporar tecnología en la parte del escrutinio al menos, no podemos seguir haciendo escrutinio de esa cantidad de votos a mano”, precisó.
Finalmente, para el caso de la Región Metropolitana y las dudas que existen sobre el margen de confusión que tendrá el hecho de tener a dos candidatos con el mismo apellido (Claudio Orrego y Francisco Orrego), la autoridad recordó que, de cometerse algún error, cada votante puede exigir una segunda papeleta a la mesa. No obstante, de persistir en el error, habrá que esperar cerca del final del cierre para ver la posibilidad de ejercer por tercera vez el voto.