El pasado jueves 21 de noviembre, el Presidente Gabriel Boric encabezó la ceremonia de entrega de los premios Iberoamericano de Narrativa Manuel Rojas 2023 e Iberoamericano de Poesía Pablo Neruda 2024. Dos de los galardones literarios más importantes de nuestra región y que, en dichas ediciones, recayeron en los escritores Alejandro Zambra y Rosabetty Muñoz.
En la ocasión, también estuvo presenta la ministra de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, Carolina Arredondo, quien puso en relevo la carrera de ambos autores. Ambos, nombres fundamentales de la literatura local. “Como institución valoramos y agradecemos esa potencia creativa y reflexiva que ha hecho merecedores de este reconocimiento a Alejandro Zambra y Rosabetty Muñoz, quienes también son protagonistas de una escena nacional que refulge y sigue posicionando a la literatura y cultura chilena a nivel internacional”, destacó la secretaria de Estado.
En esa misma línea, agregó que “uno de nuestros principales objetivos como Gobierno ha sido situar a la cultura en el centro de las políticas públicas, ya que entendemos a esta dimensión como un bien indispensable para avanzar hacia un desarrollo económico, social y cultural más sostenible”.
Por su parte, el mandatario aprovechó la instancia para destacar la importancia de la cultura y la literatura como un aspecto invaluable para la vida en sociedad. “¿Cómo vamos a recuperar la convivencia o cómo vamos a generar la cohesión en una patria dividida por clases si es que no somos capaces de entender que tenemos una cultura distinta, pero que nos es común?”, partió preguntándose el Presidente.
“Que no hay que llevarla desde los grandes escenarios a las poblaciones, sino como bien hace Rosabetty desde Chiloé, permitir que se generen las condiciones para que en cada rincón de Chile surjan los poetas, las actrices, los cineastas, quienes hagan cerámica”, concluyó Boric, quien en su momento ya había celebrado el hito de los escritores.
Tras recibir el reconocimiento, Zambra, autor de libros como “Formas de volver a casa” y “Literatura infantil“, compartió con los presentes una anécdota ligada a su descubrimiento de Manuel Rojas. “‘Zambra no tiene personalidad para leer su poema delante de todas las mamás’. A veces, cuando me toca hablar en público, como ahora, y estoy un poco nervioso, como ahora, sobrevuela mi cabeza esa frase demoledora de la señorita Lorena, mi profesora de primero a tercero básico”, arrancó leyendo el escritor.
“Sin embargo, leí por primera vez a Manuel Rojas, el autor que hoy nos reúne, en casa de esa profesora, de pie frente a los libros que ella acumulaba junto a la tele. ‘Manuel Rojas es el mejor escritor de todos los tiempos, pero no escribía para niños’, me dijo, quitándome el libro de las manos. No se me ocurre mejor presentación para un escritor que prohibir su lectura y proclamar su grandeza en una sola frase memorable”, sumó.
Asimismo, Muñoz compartió en su discurso una reflexión ligada al arraigo territorial que sostiene su escritura: “Mi poesía aspira a participar de la vida del archipiélago de Chiloé, tener un lugar en la conversación profunda con los mayores. Es una poesía política, en tanto procura ser activa en cuanto a pensar el desarrollo desde nuestras propias visiones del mundo, y es parte de la resistencia a un sistema que castiga los modos de una cultura densa, ligada a lo natural”.
“Por eso, es importante que sea leída en el lugar donde nace. Este reconocimiento pone atención sobre un trabajo que quiere llegar primero a los más cercanos, a los isleños, que son sus protagonistas. ‘A donde voy llevo mi paisaje’, decía Pedro Lemebel. Escribir es comprometerse profundamente con las preguntas y visiones que nacen en este mundo de provincia, sureño, alejado de las grandes urbes y, al mismo tiempo, desarrollar una escritura que pueda ser leída en la amplia mesa de la literatura sin apellidos”, agregó la poeta.
Cabe destacar que el premio Iberoamericano de Narrativa Manuel Rojas reconoce cada dos años a un autor o autora con una vasta trayectoria en la narrativa iberoamericana, de América o Europa. Fue creado el 2012 por el entonces Consejo Nacional de la Cultura y las Artes y la Fundación Manuel Rojas como un homenaje al autor chileno. Esto, en el centenario de su cruce a pie de la cordillera de los Andes.
Por otro lado, el premio Iberoamericano de Poesía Pablo Neruda fue creado el 2004 para conmemorar el centenario del poeta por el Consejo Nacional del Libro y la Lectura, con apoyo del Banco Estado y el patrocinio de la Fundación Pablo Neruda.