Contra el tiempo, a una hora de sesionar la Comisión de Trabajo del Senado y luego de varios aplazamientos, la ministra del Trabajo, Jeannette Jara, confirmó este miércoles el ingreso del paquete de indicaciones que modificará la reforma de pensiones, en uno de los últimos intentos por destrabar la iniciativa y lograr su aprobación. Las primeras reacciones muestran que la iniciativa cuenta con un amplio respaldo.
La titular del Trabajo llegó poco antes de las 11:30 horas a la sede del Congreso Nacional, con un borrador en mano de más de 150 páginas de enmiendas que reflejaban los acuerdos con los miembros de esta instancia, su presidente, Juan Antonio Coloma (UDI), Rodrigo Galilea (RN), Luciano Cruz-Coke (Evópoli), Gastón Saaveadra (PS) y Alejandra Sepúlveda (independiente). “Estamos contentos porque ha sido un trabajo que ha ido rindiendo sus frutos”, señaló.
“Anticipa lo que el proyecto del Gobierno del Presidente Gabriel Boric ha puesto en la centralidad de este debate que es mejorar pensiones actuales y futuras y, por cierto, también tener cambios regulatorios importantes en la industria de las AFP“, declaró Jara, evitando en entrar detalles respecto al guarismo.
Las más de 150 páginas de indicaciones reflejan -entre otros elementos- un sistema mixto en materia de financiamiento, con un 6% de cotización adicional del empleador, donde un 4,5% se destinará directo e íntegramente a las cuentas individuales de cada cotizante. Dicho porcentaje se aumentará de manera gradual en 0,15 puntos porcentuales cada doce meses.
Además de un 1,5% a un préstamo reembolsable a devolverse en un plazo máximo de 30 años con intereses. En el caso de las mujeres, deberán tener 13 años cotizados para acceder al beneficio y, los hombres, 20 años. Dicho porcentaje se disminuirá en 0,15 puntos porcentuales por cada 12 meses hasta alcanzar 0%.
Asimismo, el paquete contiene un punto para “seguro social” que trata de un bono -gradual- con componentes permanentes y transitorios, que busca compensar las jubilaciones de las mujeres, cuyo piso monetario mínimo será de 10 mil pesos, y que será parte del ya existente Seguro de Invalidez y Sobrevivencia (SIS). Este aporte llegaría a un 2,5%.
Por otro lado, las AFP seguirán existiendo, pero tendrán competencia a través de inversores, y en administración se incorporará como actor al Instituto de Previsión Social (IPS), lo que quedará a elección del afiliado o afiliada. Igualmente, se incorporarán otros componentes regulatorios al sistema como la licitación de stock.
El ministro de Hacienda, Mario Marcel, destacó que el proyecto “va a beneficiar a 2,8 millones de adultos mayores“, quienes verán un aumento de pensiones entre 14 y 35%. Marcel sostuvo que la iniciativa es financieramente responsable y que, midiéndolo en porcentaje del Punto, el aporte del trabajador será de 2,9%, los empleadores de un 2,4% y 2,5% aporte del Fisco.
El senador de Evópoli, Luciano Cruz-Coke, sostuvo en conversación con Senado TV que “hemos llegado a un acuerdo que será beneficioso para la ciudadanía (…) Yo quedo conforme con lo que hemos conversado, logrado”.